Conducción temeraria, sin licencia hábil para conducir y 0,67 en la primera prueba
La situación de Shashoua se complica por diversos agravantes que recoge el atestado policial, que hoy publica la SER
Santa Cruz de Tenerife
El caso Shashoua está repleto de agravantes que sitúan en una muy delicada posición al futbolista del CD Tenerife, respaldado de puertas adentro por el cuadro técnico y sus compañeros, si bien desde la entidad reprueban categóricamente los comportamientos que sostuvo en la madrugada del lunes al martes de la semana pasada.
No fue un control rutinario el que motivó la prueba de alcoholemia, tal y como se ha publicado equívocamente. El curso de los acontecimientos es el que hoy publica la SER, amparándose en el relato de testigos oculares y en el contenido de las diligencias abiertas a los efectos oportunos. Agentes policiales que estaban de servicio en la noche del 11 al 12 de octubre habían retenido a otro vehículo a la altura de Hacienda y se encontraban practicándole las correspondientes pruebas a su conductor, en la capital tinerfeña, cuando el coche de Shashoua sale del Cabildo y ve las luces que le advierten de la presencia de un coche de la Local.
Es entonces cuando el futbolista británico decide cambiar su ruta primigenia, ir por la calle Bravo Murillo, circular por varias vías con evidentes síntomas de embriaguez en su forma de maniobrar al volante -como así luego se ocupó de ratificar la prueba de alcoholemia- y llega finalmente a la altura del Teatro Guimerá, donde opta por salir del coche, lo mismo que hacen sus acompañantes.
Shashoua mostró malos modos con los agentes que le pidieron que se identificara y le dieron el alto. "Puto racista", fue uno de los insultos vertidos por el atacante blanquiazul, que dio +0,67 miligramos de alcohol en la prueba evidencial. Lejos de ofrecer un registro más favorable en la sede de la Policía Local, el siguiente dato numérico fue también propio de un delito penal (contra el tráfico y la seguridad vial), yéndose el alcoholímetro hasta un escalofriante dato por encima de +0,70.
Durante el procedimiento, se identificó a otros dos futbolistas del Tenerife, ambos adscritos a la disciplina de filiales. Asimismo, los agentes comprobaron que al menos uno de ellos se había visto envuelto en una pelea en un local de copas de la capital un rato antes, información que ya ha llegado a oídos de los dirigentes de la institución, con la consiguiente aplicación del código disciplinario del representativo. Que se ejecutará de forma implacable, sostienen desde las oficinas del Heliodoro las fuentes consultadas por Radio Club Tenerife.
El Tenerife confía en un acuerdo previo al juicio para que Shashoua ni tan siquiera tenga que pasar por tan amarga y difícil experiencia, que tendría repercusión mayor por su condición de personaje público. Y todo apunta a que los esfuerzos emprendidos por el club tendrán el efecto deseado. Pero la situación de Sam podría complicarse por varios motivos: presuntamente no llevaba encima una licencia hábil para conducir en España, además las diligencias policiales recogen su falta de respeto a la autoridad y malos modos; y por si fuera poco, en un primer momento hay serios indicios de que pudo haberse dado a la fuga, circunstancia también tenida en cuenta por parte de los agentes en el momento de abrir el proceso que desembocará en un juicio rápido a celebrar el próximo 28 de octubre.
Qué dice el atestado policial
Fuentes conocedoras del caso apuntan a la SER que es sobre las 5:15 horas de la madrugada del lunes al martes cuando tienen constancia de un caso de conducción temeraria por parte de un Volkswagen Polo gris en el que circulan Sam Shashoua y otros dos jóvenes.
Asimismo, recoge que "en el momento de dar el alto de forma clara e inequívoca con señales luminosas, el vehículo emprende la marcha de forma agresiva". A continuación, anota que el vehículo de patrulla lo sigue a distancia de seguridad y relata una persecución que se produjo en el Puente Serrador. Fuentes consultadas por la SER exponen que, en una maniobra difícil de entender, Shashoua dio marcha atrás en dirección a la Plaza de España para evitar el control policial, con el consiguiente peligro para su propia seguridad y la de terceros.
Finalmente, encuentran su vehículo "estacionado" e identifican "sin lugar a dudas y de forma inequívoca" al conductor, con claros síntomas de estar bajo influencia de bebicas alcohólicas. Tras dar la primera prueba de muestreo +0,67, se le requiere a Shashoua que acuda a dependencias policiales. Su comportamiento poco edificante a la salida de la Jefatura también lo conocen ya en el Tenerife, donde confían en que comportamientos como éste no se reproduzcan y que la gravedad de este caso sirva de lección a todos los implicados.