Desaparecen cinco de las siete brujas de Trasmoz
Estaban ubicadas en las hornacinas que salpican la nueva ruta circular dedicada a las brujas que bordea la ladera del castillo con el Moncayo de frente. El recorrido está dedicado a las historias de brujería que dan fama internacional a este pueblo de la provincia de Zaragoza
Tarazona
Desaparecen cinco de las siete brujas colocadas en la ‘Senda del Mirador de los Olivos’ de Trasmoz (Zaragoza). Se trata de un recorrido circular de unos 300 metros que “va desde la Casa del Poeta hasta el Mirador de los Olivos, bordeando la ladera del castillo y con el Moncayo en todo momento de frente”, explica el alcalde, Jesús Andía.
El recorrido se ha salpicado con “unas setas de hierro a modo de pequeña cabaña que tienen una brujita dentro y que se iluminan por la noche”.
Una cucada que ha llevado a algunos a alargar la mano más de la cuenta. Así, “de las siete brujas que hay puestas han desaparecido ya cinco", detalla Andía.
"Se van a reponer con más medidas de seguridad”, admite con resignación el alcalde, “estaban muy visibles, muy al alcance de la mano y hay personas que se las han llevado”.
Misterio y brujería en Trasmoz
A falta de reponer los elementos sustraídos, la senda está cargada del espíritu de misterio y brujería que rodea a Trasmoz y que lo identifican a nivel internacional convirtiéndolo en el atractivo turístico del pueblo.
Bajo el castillo y con el Moncayo de fondo, “se ha colocado una estampa de hierro a modo de corazón con una bruja en el centro que lleva ya miles de selfis”.
La desaparición de las cinco brujas dista mucho de otro hecho mucho más sonado pero que tuvo lugar a pocos metros del castillo, el robo de la estatua de bronce a tamaño real de Gustavo Adolfo Bécquer en 2014.
En ese caso, la estatua fue troceada y vendida al peso a un chatarrero de Tudela. Por este hecho fueron detenidos y condenados a prisión tanto el autor de los hechos como el receptador de la estatua.