Dos vertederos de Madrid emitieron la mayor cantidad de gas metano de Europa
El dato, recogido entre agosto y octubre, lo revela la Agencia Espacial Europea
Madrid
Un estudio de la Agencia Espacial Europea (ESA) revela que dos vertederos adyacentes entre sí y cercanos al centro de Madrid emitieron “importantes cantidades” de metano entre agosto y octubre, la mayor cantidad de ese gas observada en toda Europa.
La alta presencia del metano, que se mide con satélites de alta resolución en la misión Sentinel-5P de Copernicus, se registró en dos vertederos ubicados a unos seis kilómetros entre sí y a solo 18 kilómetros del centro de Madrid, según recoge en un comunicado la ESA.
En conjunto, ambos emitieron 8.800 kilos de metano por hora del 20 de agosto al 13 de octubre pasado, según las mediciones que, combinadas con las imágenes comerciales de alta resolución de GHGSat, han sido analizadas por científicos del Instituto Holandés de Investigación Espacial (Sron). "Aproximadamente 350.0000 viviendas podrían alimentarse con la tasa de pérdida de metano de los vertederos de Madrid", continúa la ESA.
Uno de ellos llegó a liberar de media 5.000 kilos de metano por hora, por causas que se desconocen, según las imágenes de satélite que muestran una nube de este gas de efecto invernadero moviéndose hacia una zona residencial cercana, una situación solo comparable a vertederos de Bangladesh.
"Madrid no es la única que tiene vertederos ubicados cerca de las viviendas. En abril de 2021, el satélite más nuevo de GHGSat, Hugo, registró grandes cantidades de metano (aproximadamente 4.000 kilos por hora) procedentes del vertedero Matuail de 73 hectáreas en el sur de Dhaka, Bangladesh", añade la ESA.
Las mediciones se obtuvieron días después de que Madrid registrara una de las temperaturas más altas de su historia durante la ola de calor que afectó a gran parte del sur de Europa este verano.
Desde la ESA recuerdan que el 26 por ciento de las emisiones de metano en el continente proceden de la basura, por la descomposición de la materia orgánica, aunque esto se prevé reducir de aquí a 2030.