El Gobierno de Navarra retira en el último momento la reforma del Convenio para evitar su rechazo
Navarra Suma amaga con el apoyo pero luego apunta a la abstención junto a EH Bildu y Geroa Bai, socio principal del ejecutivo de la socialista María Chivite
Pamplona
El Gobierno de Navarra ha decidido retirar en el último momento la reforma de la Ley que regula el Convenio Económico entre Navarra y España después de que el debate parlamentario dejara patente la posibilidad de que la modificación fuera rechazada. El cambio en el texto acordado entre el Palacio de Navarra y el Ministerio de Hacienda necesitaba mayoría absoluta, 26 votos favorables, para salir adelante y sólo tenía asegurados 14 apoyos (PSN, Podemos e IE).
El cambio acordado entre Gobierno navarro y central incluía la asunción de 3 nuevos impuestos y estaba establecido como último punto del orden del día del último pleno del año. EH Bildu y Geroa Bai habían avanzado ya que su intención era abstenerse porque consideraban que debía retirarse la mención expresa a que el indice de imputación, que determina la cuantía que Navarra paga a Hacienda en virtud de las competencias no transferidas, se fijaría en la comisión negociadora entre gobiernos, formada por técnicos de ambas administraciones. En realidad, desde la aprobación de esta Ley en 1990 ha sido esta comisión la encargada, pero la portavoz de Geroa Bai, Uxue Barkos, ha apuntado que el anterior gobierno presidido por ella había solicitado al central que se diera papel al Parlamento en la fijación de ese índice. Sin embargo, durante el periodo de Barkos en la presidencia del ejecutivo no se acordó ninguna modificación del texto legal. El último cambio data de 2015 cuando Lourdes Goicoechea (UPN) y Cristóbal Montoro (PP) acordaron variarlo para adaptarlo al cambio de domicilio fiscal de la exportadora de los coches de VW Navarra. Entonces la modificación fue respaldada por UPN, PP y PSN.
En el debate de este jueves, el portavoz de Navarra Suma, Javier Esparza, ha señalado que este debate era sobre un "acuerdo técnico que no afecta a nada sustancial", dando a entender que apoyaría el cambio. Sin embargo, en la réplica final se ha desmarcado del apoyo y ha considerado que el texto debía volver al gobierno para que busque consenso con el Parlamento. Antes, durante la intervención de Uxue Barkos, la portavoz del principal socio del Gobierno de María Chivite (PSN), ha apuntado a que ésta tenía ya un acuerdo cerrado con Navarra Suma para este proyecto. Ha añadido; "para mi grupo y para mí, mi Gobierno era aquel -el de la legislatura pasada- y este, pero cuando creo que el Gobierno no lo ha hecho bien estoy obligada a decirlo". Barkos señala que esta reforma es un "punto de inflexión de legislatura" que tiene "mucho de positivo", como la actualización de los ajustes del IVA, pero también tiene cuestiones "claramente negativas".
La retirada del texto deja, sin embargo, varias incógnitas. Por una parte, si existe la posibilidad de reformular con el Ministerio de Hacienda cambios en el acuerdo inicial a propuesta de los grupos. Además, introducir que el Parlamento apruebe el cálculo de la aportación, que se revisa cada cinco años, supondría también trasladar esa potestad también a las Cortes Generales, donde tanto Ciudadanos como Vox han considerado en varias ocasiones un privilegio el Convenio Económico. Asimismo, deja dudas sobre el grado de confianza que quedará entre el PSN de la presidenta Chivite y su socio principal,Geroa Bai, tras este agrio debate. El desmarque de Geroa Bai del gobierno en el que tiene 4 consejeros y de Navarra Suma de la postura favorable al caracter pactado entre los dos gobiernos del Convenio llega 4 días después de que se publicara la última edición del Navarrómetro. La encuesta que encarga el Parlamento a la UPNA apuntaba a un descenso de apoyos para ambos grupos con caídas de dos escaños en los dos casos.