La firma: "Lo del 13 de febrero no tiene nombre"

Aranda de Duero

Ya señalé en la tertulia en esta emisora que la convocatoria de elecciones en Castilla y León el próximo 13 de febrero es una mala noticia. Y lo es porque parece más un acto de venganza o una rabieta o una demostración de fuerza de unos políticos contra otros.

No se ha hablado de mala gestión, de fracaso en las decisiones, de no haber cumplido programas; se ha presentado como una pérdida de confianza, una traición por negociar con otros, por una posible amenaza con una moción de censura. Todo, sospechas.

Y a continuación ha llegado el contraataque del dimitido o destituido y entonces el listón del descrédito ha subido varios peldaños y se habla de traición, de convertir la política en un estercolero, de mentiras, ambición, de construir una máquina de fango, de falta de dignidad, de basura, inmoralidades, además de palabras malsonantes propias de escenarios más cutres y barriobajeros.

Y ahora aparece el eslogan del candidato del PP para emular a la presidenta de Madrid: “Sanchismo o futuro”. Quiero que me digan en qué consiste el futuro, cuál es el futuro político que nos espera.

Les voy a recordar lo que necesitamos en la Ribera del Duero burgalesa además del hospital, el directo y la autovía este-oeste. Necesitamos figurar en la lista de los polígonos industriales que se ofrecen a los demandantes de suelo (que no todo es Valladolid). Queremos ciclos formativos públicos (no congelados en la agenda de un centro concertado) porque nos faltan profesionales. Necesitamos una extensión de la Universidad de Burgos, viviendas de alquiler para jóvenes, que la sede de la Junta en Aranda sea digna, que apoyen los eventos en la comarca (ciudad europea y otros) y en resumen, que nos consideren una ciudad normal, ciudadanos normales, que no nos mientan ni nos engañen, que sean claros y sinceros. Nada más y nada menos.

Esperemos que los ribereños y arandinos sepamos leer ese futuro y no nos dejemos llevar por fantasías, cuentos, mensajes muertos o venganzas partidistas que no nos sirven para nada.

Un saludo y buen año nuevo.