Cómo 'acostumbrar' a nuestro perro a los ruidos fuertes para que no sufra con los petardos
Los perros tienen una capacidad auditiva mucho más desarrollada que los humanos y el ruido de los petardos en estas fiestas les causa pánico y les crea ansiedad
Los perros se asustan y esconden con el ruido de los petardos. / Heather Paul (Getty Images)
Fuenlabrada
Las celebraciones navideñas, en especial las que realizamos para despedir el año y dar la bienvenida a otro, suelen estar ligadas al lanzamiento de cohetes o petardos, una práctica que puede ser realmente molesta y causar inquietud en muchas personas, en especial los mayores o aquellas que tienen trastorno autista. Pero también, los petardos son un auténtico problema para los animales domésticos que viven con nosotros, como los perros. Así lo recuerda Jesús Montero, Policía e instructor de guías caninos, creador del canal de Youtube ‘Más allá del olfato’.
Montero asegura que con los petardos los perros “lo pasan realmente mal, despiertan en ellos mucho temor”. Recuerda que estos animales tienen una capacidad auditiva mucho más desarrollado que los humanos, percibiendo sonidos a 40.000 hertzios, mientras que nosotros sólo llegamos a 20.000. “Sus oídos son mucho más potentes, son capaces de oír cosas como el zumbido de una bombilla o el latido de un bebé dentro de la tripa de su madre”. Con ese super oído, un petardo “le crea ansiedad, pánico, porque no entienden que son fiestas y que es algo que se hace por diversión, ellos piensan que se está acabando el mundo, es un trauma tremendo”.
Jesús Montero, Policía e instructor de guías caninos, explica cómo afectan los petardos a los perros y cómo ayudarles.
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Pero, ¿cómo evitar esto? Montero aconseja acostumbrar a nuestros perros a ruidos fuertes, un trabajo que se hace de forma progresiva para que cuando llegue esta época “no lo pase tan mal”. No obstante, en estos días de petardos es mejor tener al animal en la zona de la casa donde menos lleguen los ruidos para que no le impacten tanto. Además, recomienda ponerle un poco de música relajante. “En mi canal de Youtube tengo un video que hice yo, una mezcla de música relajante, con el sonido de fondo de una perra amamantando a sus cachorros, para que el perro se sienta en un entorno seguro”, una táctica que, dice, ayuda mucho .
Montero recuerda que estas son cosas puntuales, pero que el trabajo con nuestro perro debe empezar al terminar la Navidad, es cuando hay que comenzar a prepararle para no asustarse con los ruidos fuertes. “Nosotros desde que tenemos el cachorro para entrenar para la Policía le hacemos ruido cuando está comiendo. Yo recomiendo que cuando estén comiendo le pongan unos altavoces cerca con música, empezar música suave y luego ir aumentando para que se vaya acostumbrando”. Así, afirma, llegará un día en que tengamos la música a todo volumen y el animal “esté comiendo tan tranquilo”. Este ‘entrenamiento’ hará que cuando escuche ruidos muy fuertes, petardos u otras cosas en la calle, no se asuste tanto y sea una experiencia menos traumática.
Sobre las adopciones de animales en Navidad, Montero subraya que tenemos que tener en cuenta que un perro es un ser vivo, con sentimientos y hay que saber cuidarlo y no tenerlo por impulso. Mejor adoptar, que comprar, pero lo que si recomienda es no hacerlo estas navidades, esperar a después y tomar una decisión responsable en la que se tiene que tener en cuenta cosas como qué tipo de perro queremos, cómo es, cuáles son sus necesidades y qué podemos ofrecerle nosotros, según el núcleo familiar y la vida que llevemos.
