La alternativa a construir sobre la lava del volcán de La Palma es hacerlo en suelo protegido

La Palma

El Decreto Ley por el que se adoptan medidas urgentes en materia urbanística para la reparación de los daños ocasionados por el volcán de La Palma es el resultado de las aportaciones de los tres ayuntamientos del Valle y el Cabildo. El borrador de este Decreto, al que ha accedido la Cadena SER, no contempla la posibilidad de construir sobre las coladas del volcán, como se planteó inicialmente. La alternativa es permitir a quienes tenían su casa bajo la lava construir una nueva donde antes la calificación territorial lo impedía.

Quienes no hayan perdido del todo sus propiedades podrán reconstruir sus viviendas allí, "siempre que resulte materialmente posible", se explica en el borrador. Sin embargo, quienes tengan sus propiedades totalmente sepultadas bajo la lava deberán buscar un suelo alternativo. Eso si, contarán con beneficios únicos. La reconstrucción podrá ejecutarse "en cualquier parcela que esté clasificada como suelo urbano, suelo rústico de asentamiento, suelo rústico común, de protección agraria e incluso de protección paisajística", se explica en el borrador.

Sin embargo, para poder construir en parcelas con calificación rústica o superior es imprescindible demostrar que se trata de la única vía a la que pueden recurrir. Solo las víctimas que hayan visto sepultadas por completo sus viviendas podrán constuir en este tipo de suelos, siempre que no dispongan de suelo urbano alternativo. Quedan excluidos, lógicamente, los espacios naturales protegidos y la Red Natura 2000, "salvo que en el respectivo plan o norma legitime el correspondiente uso o edificación en dicha zona", dejando así una puerta abierta a construir incluso en estas zonas.

El borrador del Decreto Ley establece la posibilidad de una permuta para quienes no dispongan de otras parcelas

En caso de que los propietarios de viviendas habituales afectadas por el volcán no dispongan de otras parcelas "sobre las que ostenten algún derecho subjetivo en el ámbito territorial de esta norma", explica el artículo cuatro, "podrán solicitar la permuta de bienes inmuebles patrimoniales o del patrimonio público del suelo de titularidad de los correspondientes Ayuntamientos con las parcelas donde se ubicarán las viviendas", explica el borrador. La permuta funcionaría en realidad como una ayuda a los afectados por la erupción.

Unos plazos imposibles para una administración muy lenta

El aspecto más llamativo del borrador del Decreto Ley es el establecimiento de plazos draconianos tanto para los afectados como para las administraciones locales. En caso de que la solicitud no reuniera los requisitos exigidos por la normativa aplicable, el Alcalde o Alcaldesa requierirá al solicitante por una sola vez y por plazo de diez días para que se subsane. La no aportación de los documentos exigidos facultará al Alcalde o Alcaldesa a decretar la inadmisión de la solicitud. Además, las víctimas tendrán un plazo de dieciocho meses desde la publicación del Decreto para presentar las solicitudes de obra acompañada del proyecto básico y de ejercución, ajustandose a absolutamente todos los requisitos.