Los Merino-Alcántara, cosecha del 96 para la Real Sociedad

San Sebastián

La saga Merino-Alcántara continua en la Real Sociedad 26 años después. Comenzó en 1996 en el Celta de Vigo y sigue muy viva en el club donostiarra. Porque en la temporada 96-97 Mazinho y Miguel Merino jugaron juntos en el Celta que era el germen del gran equipo que fue con jugadores de la talla de Mostovoi y Gustavo López, entre otros. Y ahora sus hijos vuelven a jugar juntos en la Real Sociedad, después del fichaje en este mercado de invierno de Rafael Alcántara para coincidir con mikel Merino, asentado como unos de los futbolistas más importantes del equipo al que entrena Imanol Alguacil. "Esta cosecha puede mejorar a aquella, los dos pueden tener muy buena sintonía", señala en la Cadena SER el padre de Mikel, el histórico jugador Miguel Merino.

"Es la casualidad y la suerte del fútbol. Porque es muy difícil llegar hasta donde han llegado nuestros hijos. Y que hayan coincidido en el mismo equipo y en la misma liga, siendo Mazinho encima brasileño y que tuviera yo la oportunidad de jugar con él en el Celta. Y me hace recordar aquella temporada con 'Maza', porque así le llamábamos en Vigo. Y Maza era un profesional de los pies a la cabeza, había ganado ya el Mundial y llegó con una humildad extraordinaria para trabajar para el Celta", recuerda Miguel Merino, que también era centrocampista como hijo. Así los Merino-Alcántara que comparten medular en la Real también la compartieron en el Celta, aunque con un pequeño matiz. "Obligado por la circunstancia me cambiaron de posición en el centro de campo. Porque en el equipo estaban Eusebio, Mostovoi, Mazinho... Mucho nivel, vamos. Esa temporada, por mi edad y mis conocimientos tácticos, me necesitaron en el lateral derecho y jugué casi toda la temporada ahí. Coincidí en pocos partidos con Mazinho en el centro del campo, pero en el terreno de juego sí que jugamos mucho juntos esa temporada".

Eso sí, Mikel Merino y Rafinha no se conocieron de niños cuando sus padres jugaban en el Celta. "Rafa es un poco mayor, tiene 28 años, y Mikel 25. Así no llegaron a conocerse, porque Mikel tenía entonces 2 años, y Rafa ya estaría por los 6. Pero sí le recuerdo de niños estar allí en los entrenamientos con su hermano Thago, con un balón que era casi más grande que ellos, jugando y demostrando que manejaban muy bien el balón. no me extraña lo que han llegado a ser", dice Miguel, que sonríe cuando se le pregunta si esta cosecha del 2022 de Merino-Alcántara puede superar a la del 96 con él y Mazinho. "No se yo, eh. A ver creo que sí, que es mejor. Por lo menos, la cosecha Merino ha madurado mucho y es mejor. Todavía le quedan por mejorar, pero que es un jugador más completo de lo que yo era y es top. En el caso de Mazinho y Rafinha, preguntádselo a él y que se moje, pero Maza es un profesional espectacular. Pero Rafa y Mikel se pueden entender muy bien, porque son jugadores de calidad y tienen una lectura de juego muy similar, y una capacidad física como para trabajar en atAque y defensa. A mí me impresionó mucho su debut el otro día con la Real".