"Ya saben que tienen que venir al cole como una cebolla, con muchas capas"

Logroño

La ventilación es una de las medidas claves en los colegios. El protocolo de la consejería de Educación es abrir cinco minutos, cada veinte minutos y entre clase y clase, que unido a los medidores de aire que hay en cada centro garatiza la renovación del ambiente y evita que el virus ronde. Eso sí, la ventilación y los medidores supone un mayor consumo de energía.

"En esta situación que estamos es importantísimo potenciar todas las medidas preventivas que tenemos. Una de ellas, la más importante es la ventilación para garantizar la seguridad del alumnado", así lo ha explicado Ignacio Aguado, el inspector médico de la consejería de Educación del Gobierno de La Rioja en los micrófonos de la SER.

El inspector médico asegura que todos los centros educativos cumplen con los protocolos. Y lo hemos comprobado en en Hoy por Hoy La Rioja en una clase del colegio Madrid Manila de Logroño, donde una de las tutoras del centro, Laura Grandes, nos cuenta cómo es el día a día en este colegio. La clase, nos explica, tiene cuatro ventanas y dos siempre están abiertas. También la puerta, apunta, "para que haya ventilación cruzada.

Con este panorama y las bajas temperaturas de los últimos meses en La Rioja, Laura asegura que sus alumnos y alumnas ya saben que tienen que llegar a clase "como una cebolla, con muchas capas".

"Primero abrimos unas ventanas y luego otras para que no siempre sean los mismos o mismas los que pasen frío. Hacemos todo lo posible para llevar esto de la mejor manera, pero la verdad que estando aquí sentados es un poco complicado no pasar frío", añade esta tutora del colegio Madrid Manila.