Aumenta un 14,8% el número de personas que se autoprohíben jugar online
Según los datos de la Dirección General de Ordenación del Juego, 1.179 personas pidieron el año pasado en Euskadi, motu proprio, ser inscritas en el registro de interdicciones del juego online
Bilbao
La inscripción en un registro de prohibidos es un derecho de los ciudadanos que, a petición de la persona interesada, impide el acceso a aquellos juegos online o presenciales sobre los que la administración pública competente haya determinado la necesidad de realizar la identificación previa del jugador.
Según los datos de la Dirección General de Ordenación del Juego, 1.179 personas pidieron el año pasado en Euskadi, motu proprio, ser inscritas en el registro de interdicciones del juego online
En el caso de que la inscripción se realice en el Registro General de Interdicciones de Acceso al Juego (RGIAJ) de la DGOJ, la prohibición afecta al juego online y loterías, mientras que, si se hace en los registros de las comunidades autónomas se bloqueará el acceso presencial a aquellos juegos de azar y apuestas donde la respectiva normativa autonómica determina la necesidad de comprobar la inexistencia de esa inscripción.
El Ministerio de Consumo trabaja con los Gobiernos autonómicos en la firma de convenios de interconexión con el objetivo de mejorar la coordinación entre registros y, en consecuencia, avanzar en la lucha contra la ludopatía. Según el departamento que dirige Alberto Garzón, de esta manera se evitarán situaciones como que una persona que esté en el registro de autoprohibidos de una comunidad pueda jugar en otro territorio.
Por comunidades autónomas, es Baleares la que presenta el mayor incremento de autoprohibidos, al pasar de 1.179 a 1.480 en un solo año, lo que implica una subida de un 25,53 %. En Euskadi, el registro de autoexcluidos ha aumentado un 14,80%. Esto es, de 1.027 personas en 2020 a 1.179 en 2021.