Una RGI para contentar a todo el mundo

No he terminado de hojear el proyecto de ley de la RGI. 117 folios. El silencio de la oposición ayer me sugiere que tampoco ellos.

Mi primera impresión es que el Gobierno ha incorporado casi todas las críticas que impidieron su aprobación en la pasada legislatura. Mejora todas las cuantías, sobre todo, cuando hay menores. Será la renta más alta de España (antes era la tercera). Pero los 1.425 euros tope solo los cobrará un 3 por ciento de los perceptores. La inmensa mayoría, 31.000 de 51.000 viven solos y se quedan casi igual. Mejoran también las rentas de los pensionistas, hasta superar sus ansiados 1.080 euros si viven con el cónyuge. Se incorpora a refugiados, jóvenes extranjeros no acompañados, mujeres separadas…como digo, muchas reclamaciones clásicas: no suspender la paga cuando hay niños, eliminar el límite de una RGI por domicilio o crear una unidad de inspección.

¿Qué margen queda para la negociación con los grupos? Que, en general, no se revierte el recorte de 2008 y definitivamente se desvincula del SMI. Ni siquiera se garantiza el IPC. Y se sigue exigiendo tres años de padrón, salvo excepciones.

Lo iremos viendo. 117 folios dan para mucho. Ayer escuchamos al Gobierno. A partir de hoy que hablen los expertos.