Sociedad | Actualidad

Muere Patxo Unzueta, escritor y periodista vasco, a los 76 años

Autor de cientos de editoriales en 'El País', Unzueta lideró una crítica consistente y tenaz contra ETA

Patxo Unzueta. / El País

El escritor y periodista vasco Patxo Unzueta (Bilbao, 1945) ha fallecido este lunes en Bilbao a los 76 años. Según ha destacado 'El País', diario en el que trabajó durante 40 años, primero en la delegación de ese periódico en la capital vizcaína y después en Madrid, Unzueta era "un escritor formidable, extremadamente riguroso", autor de "media docena de libros, cientos de columnas firmadas y varios millares de editoriales".

Unzueta empezó su trayectoria profesional escribiendo información deportiva, si bien dedicó gran parte de sus libros a reflexionar sobre el terrorismo de ETA y su impacto en la sociedad vasca y española. Durante años, fue autor de las editoriales de 'El País', tarea en la que "fundó una escuela". "La escuela de Patxo, radicalmente opuesta a la de su amigo Javier Pradera, se refería únicamente a la conveniencia de usar o no adjetivos en los editoriales", explica el periódico para que el que Unzueta prestó sus servicios.

Pradera se declaraba partidario de lo que llamaba "editoriales trompeteros" que movilizaran la razón y la pasión al mismo tiempo, mientras que Unzueta abogaba por un estilo sobrio y concienzudo, siempre desarrollado en párrafos que tuvieran el mismo número de líneas, "como si la mesura racional que defendía debiera reflejarse también en el perfil tipográfico del texto".

Una "responsabilidad adicional" contra ETA

"A partir de una primera militancia juvenil en una de las ramas revolucionarias de ETA, se convirtió muy pronto en un crítico consistente y tenaz del terrorismo que, por espacio de 50 años, produjo efectos devastadores en la sociedad vasca de los que tardará décadas en recuperarse", recuerda 'El País'.

Ello le llevó a dedicar cientos de editoriales al terrorismo y al nacionalismo. "Su condena del crimen fue tan implacable como serena, lo mismo que su rechazo de políticas que, como las de algunos partidos nacionalistas, invocaban las libertades colectivas para justificar el privilegio propio y la discriminación ajena", rememora el periódico. "Mientras el terrorismo no fue derrotado, ser vasco, para Patxo, conllevaba una responsabilidad adicional", destaca.