"No parece que estemos ante casos de búsqueda de sumisión química"
El doctor y profesor de Farmacología de la UPV/EHU, Koldo Callado, lo afirma por dos razones: porque el pinchazo alerta a la víctima y porque con un solo pinchazo es imposible inocular el líquido suficiente para intoxicar a una persona, harían falta 3 o 4 segundos de pinchazo
Koldo Callado en Hoy por Hoy Bilbao sobre los pinchazos a mujeres
Bilbao
Este fin de semana conocíamos que la Ertzaintza está investigando una docena de pinchazos a mujeres registrados en los últimos quince días en recintos festivos y espacios de ocio de distintas localidades vascas. En ninguno de ellos se han encontrado restos de inoculación de sustancias tóxicas. Las víctimas alegan haber sentido un pinchazo en el brazo o en la pierna y posteriormente comenzar a sentirse indispuestas, mareadas y con signos de somnolencia. Los casos se han registrado en los municipios vizcaínos de Bilbao, Santurtzi, Etxebarri y Zierbena, en el guipuzcoano de Zarautz, y en Vitoria-Gasteiz.
El Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco ha señalado que no se conoce la motivación, intencionalidad o finalidad de estos pinchazos, por lo que la Ertzaintza no descarta ninguna hipótesis o línea de investigación, aunque por el momento no aprecia que esté relacionada con la comisión de un delito contra la libertad sexual o de otro tipo.
En 'Hoy por Hoy Bilbao' hemos charlado con el profesor del Departamento de Farmacología de la UPV/EHU Koldo Callado quien no cree que estos casos busquen someter de manera química a las víctimas. " El principal objetivo de la sumisión química es que la víctima no se de cuenta de que la han pinchado para luego poder ejercer robos o abusos sexuales y, en este caso, al haber un pinchazo, todas las víctimas se dan cuenta.", alega Callado, "Además, si queremos generar sumisión química se debe introducir en el organismo una cantidad suficiente de aquella sustancia que se utilice y con un solo pinchazo es prácticamente imposible. Es como con las vacunas; hay que estar 3 o 4 segundos para inyectar suficiente líquido."
Además, el profesor ha destacado lo peligroso que puede ser ir pinchado a diferentes personas con una misma aguja: " Se pueden transmitir diferentes enfermedades contagiosas y se puede pinchar en zonas peligrosas del cuerpo y que en consecuencia se generen hematomas o hemorragias. Hablamos de cuestiones serias aunque probablemente no tengan nada que ver con la sumisión química."