La Cueva de Santimamiñe, una ventana abierta a la prehistoria
La famosa cueva, situada en la localidad bizkaina de Kortezubi, contiene vestigios humanos de hace más de 14.000 años y es Patrimonio de la Humanidad
La Cueva de Santimamiñe, una ventana abierta a la prehistoria (18/11/2022)
Bilbao
Ubicada en Kortezubi, dentro del entorno natural de Urdaibai, la Cueva de Santimamiñe es el yacimiento arqueológico más importante de Bizkaia y cuenta con restos humanos de hace más de 14 mil años. Alberga en su interior casi medio centenar de pinturas rupestres que representan animales tales como bisontes, caballos, un oso o un ciervo, un santuario descubierto en 1916.
La cueva fue reconocida como Patrimonio de la Humanidad en 2008 gracias a que sus pinturas datan del periodo Magdaleniense del Paleolítico Superior. Las primeras excavaciones arqueológicas se desarrollaron principalmente entre 1918 y 1962 y desde 2004 un equipo multidisciplinar de más de 20 especialistas trabaja en una nueva fase de excavación, dentro de un proyecto de revalorización promovido por la Diputación Foral de Bizkaia.
Para conocer este enclave, en SER Viajeros Euskadi hemos hablado con Juan Carlos López Quintana, director de las excavaciones en Santimamiñe, que nos ha contado que "tiene una gran importancia historiográfica, porque se empezó a excavar en un momento en el que se estaba construyendo la evolución de la prehistoria vasca desde el método científico". Es cierto que este siglo se dio un impulso a la investigación con los nuevos sistemas".
"Tiene importancia porque aúna un importante conjunto rupestre y también un depósito arqueológico, un yacimiento, donde hay una evolución ambiental y cultural de la humanidad que es muy larga y permite conocer un gran periodo, desde hace 18.000 años hasta época tardoromana".
Sobre los últimos trabajos importantes, comenta que "los estudios en Lacueva los hicimos de 2004 a 2014, se paró porque estábamos acumulando muchísimo material arqueológico y estábamos desbordados. Entonces empezamos a trabajar con esos hallazgos y es lo que estamos haciendo".
Las cuevas se pueden visitar de martes a domingo, en horario matinal, y aunque se recomienda pedir cita, en muchos casos se puede acudir sin haber reservado.