Las discotecas vascas reclaman a las instituciones saber cómo actuar ante las agresiones sexuales

Bilbao

Tras el ingreso en prisión de Dani Alves por un presunto delito de agresión sexual, asociaciones de ocio nocturno piden un protocolo unitario para actuar de forma ordenada y sabiendo a qué atenerse. En Euskadi no existe un protocolo para estos locales, tal y como nos han contado desde los mismos, por lo que cada uno actúa según su método. Por ello, también aquí piden un protocolo unificado ya que consideran que daría más seguridad a clientes y a las propias discotecas.

Desde la sala Badulake, en Bilbao, Elena Sarasola cuenta que "cada vez hay comportamientos más agresivos, lo veo desde la barra y estamos hartas. Me parece bien que se pongan las pilas los locales de noche. El nuestro es más pequeño y controlable, pero me imagino que en los de grandes dimensiones es diferente". Coincide en la necesidad de este protocolo Fran Rodríguez, responsable de Moma, "todo lo que sea que te digan como actuar es bueno, porque a veces no sabes cómo actuar. Si hay unas directrices en caso de que pase esto, es bueno para todo el mundo". Desde Sonora en Erandio, su fundador y gerente Diego Maestre, explica que "los protocolos siempre son buenos, porque si no depende de la voluntad del empresario. Es bueno que por parte de las instituciones se convierta en algo obligatorio, si tienes claro que en todas las discotecas hay un protocolo establecido, vas a saber a donde ir de forma directa".

¿Cómo se actúa?

En Sonora, nos cuenta Maestre que "no esperamos a la agresión, en cuanto alguien está molestando, el cliente puede avisar a cualquier empleado de la discoteca para que esa persona que molesta vaya fuera directamente". Además, en relación al caso de Dani Alves, indica que tienen "presencia de personal en la entrada de los baños para que no entren chicos en el baño de chicas ni viceversa, con lo que se reduce bastante el posible problema en este aspecto".

En el caso de Moma, Rodríguez indica que "no tenemos protocolo como tal, pero tenemos un sistema amplio de seguridad. Normalmente los avisos vienen de clientes, porque con tanta gente es complicado, pero los porteros y gente de seguridad están atentos a todo. Cuando ha pasado algo, se actúa rápido, se saca a los que crean el problema y se llama a la policía". En cuanto a los baños, también están controlados, "evitamos ese tema, lo tenemos muy controlado. En cada puerta de los tres cuartos de baño tenemos un portero que evita que se mezclen sexos dentro, para que no pasen este tipo de cosas".

Dabadaba, en Donostia, nos cuenta en palabras de Álex López que ellos adoptaron en 2018 las medidas que aprobó el Ayuntamiento de Barcelona, "inmediatamente avisar al encargado o a seguridad y a partir de ahí se evalúa la situación, se habla con la persona que necesita atención, se le mete en las oficinas y siempre con la idea de que con todo lo que exceda nuestra competencia, llamar a la policía".

Únete al canal de WhatsApp de la SER

En Badulake, que es una sala de menor tamaño a las anteriores, nos explica Sarasola que "desde la barra, desde la puerta, desde los propios clientes siempre se está al tanto de que las mujeres estén tranquilas y nadie las acose. Cada vez que vemos a alguien molestando, tenemos una forma de actuar clara. Intentamos evitar las cosas antes de que pasen, porque hay algunas que se ven venir, a ciertos elementos que molestan, que vemos que pueden ser potenciales agresores, se les invita a salir del bar a la primera de cambio. El portero además está vigilante en muchos aspectos, pero en este especialmente".

Emakunde ha explicado que ya en agosto se envió a las asociaciones de hostelería una guía de actuación ante agresiones de este tipo de cara a las fiestas. Guía que en diciembre, antes de los cotillones, se volvió a enviar y que incluye pautas para evitar este tipo de agresiones en espacios de ocio. En ella, se incluyen cuatro puntos como son la prevención, la detección, la atención y la respuesta pública.

Además, se muestran dispuestas a responder a este tipo de demandas con los materiales de ayuda que sean necesarios.