Trabajadoras de las residencias de Bizkaia intensifican las protestas y no descartan una huelga indefinida si no llega el convenio

Bilbao

Trabajadoras de las residencias de Bizkaia han realizado este miércoles una nueva concentración frente al Palacio Foral tras la jornada de huelga de de este pasado martes convocadas por ELA, para reivindicar la negociación de un nuevo convenio del sector, que mejore salarios y condiciones laborales. El sindicato ha advertido de que, si se mantiene la actual situación, se intensificarán las movilizaciones sin descartar ningún escenario, por lo que la huelga indefinida "estará encima de la mesa".

Las trabajadoras están realizando desde el pasado día 1 un nuevo ciclo de jornadas de huelga, que concluye este miércoles, con diversas protestas. Sus trabajadoras llevan, según ha indicado el responsable de ELA en el sector Ander Akarregi, "dos años y medio sin convenio", de modo que mantienen salarios y condiciones laborales "congeladas", pese a los incrementos que se han producido en las tarifas de las residencias de "hasta un 10%".

El representante de ELA ha criticado que desde las direcciones de las residencias se está trasladando a las familias que este incremento "obedece a causas económicas para pagar los salarios", algo que es "totalmente falso". "Han incrementado hasta 300 euros la tarifa/día y a las trabajadoras se les sigue manteniendo los salarios congelados", ha subrayado.

La última reunión entre los representantes de los trabajadores y las empresas se produjo en octubre de 2021 y desde entonces, tras "marcharse de la mesa con una propuesta de congelación salarial", la patronal "no ha dado señales de vida", ha censurado.

Por su parte, ha añadido, la Diputación de Bizkaia se limita a "ponerse de perfil" y decir que "es un problema entre trabajadoras y empresa" cuando es "la responsable directa de que se garantice el servicio de residencias de Bizkaia".

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En este sentido, ha precisado que "quien paga, exige" pero la Diputación no está exigiendo a las patronales que "se sienten, negocien y dignifiquen el sector de los cuidados". A su entender, la Diputación debe "asumir de una vez por todas su responsabilidad".

"Abandonando a las trabajadoras"

El responsable de ELA ha destacado que la pandemia de covid-19 "ha dejado en evidencia las graves carencias que hay en el sector y ha demostrado la capacidad de las trabajadoras, que han doblado turnos, han dado lo mejor de sí mismas". Por ello, ha señalado, "se les ha aplaudido y se les ha dicho que eran esenciales" pero ahora la Diputación y las patronales las han "abandonado" y su objetivo es "precarizar las condiciones de trabajo y la calidad en las residencias".

Akarregi ha remarcado que sus reivindicaciones van "más allá de las laborales" ya que se aboga por "un modelo que apueste por la calidad en las residencias, y no un negocio de los cuidados". A día de hoy las empresas están ganando muchísimo dinero a costa del erario público. Más de la mitad de las plazas las paga la Diputación y no puede ser que, con dinero público, las empresas estén ganando dinero, y todo ello se haga además a costa de precarizar salarios y condiciones de trabajo y no garantizar un servicio de calidad", ha insistido.

En este contexto, ha anunciado que la intención del sindicato es "intensificar las movilizaciones". Según ha explicado, con la actual convocatoria de huelga, se van a alcanzar los 29 días de huelga y no se descarta a qué "escenario" se puede llegar. "El anterior convenio llevó a 378 días de huelga y, si tenemos que ir nuevamente a ese escenario, no vamos a tener duda en que lo vamos a conseguir", ha asegurado.

Huelga indefinida

Preguntado por la posibilidad de llegar a una huelga indefinida, ha precisado que "el objetivo no es hacer huelga porque sí", sino que lo que le gustaría a ELA es "firmar mañana el convenio", si bien, "si no llega, la huelga indefinida estará encima de la mesa".

Finalmente, ha valorado el seguimiento de esta última tanda de huelgas, que ha cifrado en "el 100% de las personas que pueden salir a la huelga", dado que "el servicio mínimo es del 90%", un dato que no cree "gratuito". "Lo que intentan es invisibilizar el conflicto de las mujeres, lo que molesta es que las mujeres están reivindicando en la calle sus derechos", ha denunciado.

De este modo, ha criticado que el hecho de establecer servicios mínimos "tan abusivos" imposibilita en muchos centros salir a la huelga a "una sola persona" y en algunas residencias suponen "más personal que el que tienen habitualmente". Por ello, ve "una auténtica vergüenza el papel que juega el Gobierno Vasco para dar cobertura a la patronales para que puedan prestar servicio en estas condiciones".