"Les ayuda a canalizar sus pulsiones": el rugby entra en la cárcel de Basauri para mejorar las vidas de los presos
Getxo Rugby participa en este proyecto con quince reclusos internados en régimen ordinario
El rugby llega a las cárceles vascas: "Les ayuda a canalizar el estrés y las pulsiones"
¿Puede el deporte convertirse en una herramienta para la integración social? ¿Puede serlo incluso una modalidad tan dura, de contacto, como el rugby? En Euskadi ha quedado claro que sí gracias al proyecto puesto en marcha por el Gobierno vasco, en el que este deporte se emplea como herramienta de reeducación social para 65 presos que cumplen condena en distintas cárceles vascas.
El rugby pasa a ser, gracias a esta iniciativa, una más de las actividades diarias de trabajo, estudio y formación laboral que reciben los internos. En Bizkaia son quince los reclusos que cumplen condena en régimen ordinario en el Centro Penitenciario de Basauri. Además, hay otros 50 internos del Centro Penitenciario de Araba. Unos y otros han encontrado en Getxo y Gaztedi sus equipos de rugby.
Cambia sus hábitos y su estado de ánimo
El proyecto "Transformación social y reeducación deportiva" busca crear "espacios de relación, reconocimiento interpersonal y comunicación" para hacer entrenamientos de una hora de duración semanal en el patio de la cárcel. "A través del deporte, el juego y el uso del balón, se trabajan los valores sociales y relacionales de una manera consciente", aseguran sus organizadores.
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Al mismo tiempo, añaden, supone una actividad física para los reclusos, a quienes reporta tanto un bienestar personal como una inmersión en los hábitos saludables. "Les ayuda a canalizar las pulsiones y el estrés", reduciendo su agresividad o los problemas a la hora de relacionarse, recalcan los promotores.
Latinoamérica como referencia
En la iniciativa participa la asociación sin ánimo de lucro Bitartesport junto a los grupos de rugby Getxo Rugby Taldea y Gaztedi Rugby Taldea de Vitoria. Una de sus impulsoras, Ainhoa Belakortu, explica que "la idea surgió desde el conocimiento de que, en los centros penitenciarios, sobre todo latinoamericanos, proyectos similares estaban teniendo grandes resultados".
A medida que el proyecto avanzó consiguieron que un interno que estaba con un régimen más abierto pudiera entrenar con el equipo senior masculino del Gaztedi Rugby Taldea y, poco a poco, le dieron permisos para jugar partidos los fines de semana.
Así consiguió un trabajo y hoy en día continúa ligado al deporte y en contacto con algunas personas del club, expone Belakortu como ejemplo exitoso de este proyecto.
Equipo de rugby inclusivo
Esta iniciativa del Getxo rugby no es la primera que nace en el club con vocación de trascender lo deportivo. Desde 2016, la entidad posee un equipo de rugby inclusivo, que ofrece la oportunidad de practicar este deporte a las personas con diversidad funcional.
Desde su creación, este equipo no ha dejado de crecer. A día de hoy es ya un equipo a todos los efectos para la Federación Vasca de Rugby, al igual que ocurre con Hernani CRE (Gipuzkoa), Gaztedi RT (Araba) y Universitario Bilbao (Bizkaia).
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En 2019 celebraron la primera edición de un torneo pionero en Euskadi, Harresiak Apurtuz (rompiendo barreras). En 2021, tras el obligado parón por la pandemia, las instalaciones de Fadura acogieron a los citados cuatro equipos en el primer torneo oficial de rugby inclusivo.
Se trata de equipos que cuentan con jugadores y jugadoras con distintos tipos de diversidad funcional y que encuentran en este deporte un espacio de convivencia sana, algo no siempre sencillo para ellos, pues ocho de cada diez niños con diversidad funcional sufren bullying.