Más de medio millar de personas denuncian en Donostia la violencia en las fronteras
En Irun tenemos uno de los puntos negros de la migración nacional: 9 muertos en el río Bidasoa en los últimos 2 años
San Sebastián
Más de 600 personas han celebrado en Donostia la vigésimo sexta Marcha contra el Racismo y la Xenofobia. Una que partió desde Trintxerpe y llegó a Alderdi Eder acompañada del ritmo de la batucada y pancartas y lemas reivindicativos. Con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial que se celebra el martes, 21 de marzo, 48 colectivos convocaban esta marcha para denunciar la violencia en las fronteras.
Imanol Legarda, SOS Racismo Gipuzkoa, sobre el estado de las fronteras
Y es que aquí no tenemos que irnos muy lejos para saber lo crudo que es el proceso migratorio: en la localidad fronteriza de Irun, son ya 9 los fallecidos en el río Bidasoa en los últimos dos años que trataron de cruzar la frontera. De ahí la concienciación de los asistentes a la marcha.
Voces de gente que ha secundado la marcha
Marcha que en Alderdi Eder se ha detenido y donde se ha aprovechado para leer un manifiesto, uno que ha corrido a cargo de Azzadinne El Hamdi.
Azzadinne El Hamdi leyendo el manifiesto
La UE señalada
Las situaciones en las fronteras son cada vez más violentas, sin respuesta alguna desde los gobiernos. Según los datos de CEAR, unas 800 personas murieron en el Mediterráneo tratando de llegar al Estado español en 2022. Otros 2.500 en la costa italiana, y todos los que no se contabilizan. Al llegar a la Unión Europea tropiezan con barreras como las fronteras internas, como los controles selectivos y los perfilamientos raciales.
La Unión Europea dificulta la labor de las organizaciones humanitarias, normalizando la muerte de miles de personas, impidiendo las migraciones legales. Vulnera sistemáticamente el derecho de asilo, pisoteando los derechos fundamentales de las personas que vienen abandonando las guerras y los conflictos armados.