Un alavés estafado destapa un timo mundial de criptomonedas
Le sablearon 35.000 euros y su denuncia ha permitido a la Guardia Civil desarticular una organización que deja más de 3.000 víctimas estafadas
Vitoria
La Guardia Civil ha desarticulado una organización criminal que ha estafado por todo el mundo más de cien millones de euros a más de tres mil personas con criptomonedas inexistentes. La macroestafa se destapó a raíz de una denuncia presentada por un vecino de Álava al que timaron 35.000 euros.
El denunciante invirtió inicialmente 250 euros que poco después amplió con otros 35.000 euros, atraído por los altos rendimientos. Sin embargo, cuando quiso recuperar su dinero, no hubo forma. Descubrió que era una estafa y denunció.
La Guardia Civil siguió el rastro de las transferencias y descubrió que tenían como destinataria a una empresa de Palma de Mallorca que realizaba a su vez nuevas transferencias a otros países que era el destino final del dinero. Además del empresario balear, han sido indentificadas varias personas en Azerbayán, Georgia, Ucrania, Rusia e Israel.
Rodrigo, responsable de la unidad de delitos tecnológicos de la Guardia Civil en el País vasco, sobre la estafa mundial de criptomonedas destapada
00:29
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1682355438011/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
La operación 'Mandoa' ha sido desarrollada por especialistas en ciberdelincuencia de la Guardia Civil y ha estado dirigida por el Juzgado de Instrucción número 3 de Vitoria.
La investigación ha podido constatar que los miembros de la organización captaban clientes mediante estrategias comerciales agresivas a través de internet, con llamadas telefónicas, anuncios publicitarios en periódicos, mensajes a los móviles y otros medios, en los que prometían altos rendimientos sin riesgo. La inversión inicial oscilaba entre los 250 y 1.000 euros. La organización facilitaba un acceso a una página web donde se podían consultar los beneficios con falsos gráficos creados al efecto.
Los inversores recibían constantes llamadas telefónicas en las que los falsos brokers les informaban de los "enormes beneficios" obtenidos y les animan a continuar con las inversiones inexistentes. Algunos de ellos llegaron a invertir todos sus ahorros.