El comité de Metro Bilbao ve que las últimas agresiones llevan a "pasar a otras movilizaciones" porque la situación es "grave"
Cuatro vigilantes de seguridad y un trabajador del metro fueron agredidos por dos hombres en la propia estación de Abando. Este martes se han concentrado
Bilbao
El comité de empresa de Metro Bilbao ha anunciado que, tras las últimas agresiones a trabajadores del suburbano, "hay que pasar a otro tipo de movilizaciones", más allá de las concentraciones, porque, a su entender, "es una situación grave y hay que responder", ya que se está ya "en agresiones físicas con lesiones y personal de baja o en el hospital", han advertido.
Así lo ha trasladado uno de los delegados del comité durante las concentraciones que una representación de la plantilla ha llevado a cabo ante la estación de Abando y ante las oficinas de Metro Bilbao para denunciar las agresiones ocurridas en la madrugada del pasado domingo, que se saldaron con cinco trabajadores heridos, cuatro vigilantes y un supervisor de estación, de los que dos continúan hospitalizados.
Durante las protestas, el comité ha vuelto a hacer público un comunicado en el que vuelve a emplazar a la dirección de Metro Bilbao a que busque "soluciones urgentes ante este grave problema", que "se implique, de una vez por todas y no trate de minimizar las consecuencias de esta realidad". "Nos encontramos ante un problema estructural y no coyuntural, como demuestran estos hechos", ha dicho.
En este punto, el delegado del comité, Álex Martínez, ha vuelto a recordar a los responsables de la empresa que "las medidas adoptadas por la dirección no están dando el fruto deseado" y ha mencionado, entre otras soluciones a implantar, que "básicamente se proteja al personal de líneas, que se siente desprotegido".
"Vemos que la gradación va a más y lo que se pide son soluciones pero no vemos que llegue ninguna", ha lamentado Martínez, para exigir a continuación que "los medios disponibles, los gestione la empresa de tal manera que no desproteja al personal que viene a trabajar".
"Entendemos que una persona que acude a trabajar no puede volver a su casa de esta forma porque estamos ante lesiones de consideración en varios casos y estas agresiones "se suman a la larga lista de las ya sufridas".
Preguntado por si, a juicio del comité, una de las soluciones pasa por aumentar el personal de seguridad, el delegado de la plantilla ha respondido que, por su parte, desconocen "cuál es la fórmula adecuada, aunque aumentar la seguridad sea necesario". "Hay otras fórmulas diferentes a estudiar, como perseguir a estas personas que se comportan de modo incívico y agresivo", ha mencionado.
Dentro de sus demandas, el representante del comité ha asegurado que la plantilla también "echa en falta" que la empresa acompañe a aquellos agredidos cuando tienen que acudir al juzgado.
En este sentido ha exigido que "tome cartas en el asunto y no deje al personal solo ante la justicia, y haga todo lo que esté en su mano para perseguir este tipo de actitudes y hechos".
Denuncia pública a los agresores
En esta misma línea, tras solicitar a la dirección que "colabore activamente en la denuncia pública de estas agresiones", ha advertido de que "de nada sirve acompañar al comité de empresa" en las concentraciones convocadas "si, con todos los medios de que disponen, se dedican a silenciar los ataques, en vez de colaborar en su visualización".
"Emplazamos a la empresa cada vez que hay una agresión pero, tristemente, su respuesta no satisface ni al personal de línea ni al comité de empresa" ya que, tal y como ha subrayado, responden como argumento que "trabajan en ello, que ya existe un protocolo para estos casos y que se aplica de manera correcta, pero la sensación de la plantilla es bien diferente".
Preguntado el delegado del comité por si han pedido reunirse con la dirección para abordar esta situación, Martínez ha afirmado que "no ha habido reuniones, aunque por nuestra parte estamos abiertos a hacerlo, pero no sé si ése será el caso desde la empresa".
A su vez, el comité ha pedido al conjunto de trabajadores "calma y profesionalidad" y que, "en ausencia de recursos", se "autoprotejan". "Nos gustaría que esta lacra de insultos, amenazas y agresiones terminara, pero vemos que no hay alternativa real por parte de la empresa", han lamentado.
Por otro lado, la plantilla solicita a la sociedad en general que "siga mostrando colaboración y respeto" hacia los trabajadores del suburbano, "tal y como lo hace el 99% de las personas que utilizan Metro Bilbao".
"No podemos permitir que las actuaciones de una minoría empañen el correcto comportamiento de una inmensa mayoría y menoscaben el servicio y la atención que ofrecemos. El insulto, la amenaza y las agresiones no son la solución. Establezcamos entre todas y todo un firme camino de respeto y colaboración", ha concluido.