"Ha sido una experiencia irrepetible": Mayo, Astarloa y David López se deshacen en elogios hacia la afición
Ser Deportivos Bilbao hace balance del arranque del Tour en Bizkaia
Especial Ser Deportivos desde el espacio Spiuk en Bilbao
La programación deportiva de Radio Bilbao ha querido rendir su homenaje a la salida del Tour de Francia desde Bilbao y Amorebieta. La capital vizcaína se volcó con la Grand Depart de la ronda gala. Sus vecinos abarrotaron las calles por las que discurrió la salida neutralizada y horas más tarde el recorrido por la ciudad hasta la meta. Miles y miles de bilbaínos aplaudieron y vitorearon el fugaz paso del pelotón, pero no fueron menos los que lo hicieron a lo largo de los 196 kilómetros que recorrieron Bizkaia. El territorio histórico se tiñó de amarillo. Tal fue la ilusión que desprendían los márgenes de las carreteras que Cavendish, el veterano campeonísimo corredor del Astana, dijo que había sido la mejor salida del Tour que había vivido. Una referencia más que válida porque lleva 14 participaciones en la ronda francesa.
Christian Prudhomme, el director del Tour, se ha despedido de Euskadi con aplausos a la afición vasca. "Habéis sido formidables. Soy yo el que tiene que daros las gracias". Será una edición inolvidable para todos los que se echaron a las cunetas de las carreteras y a las aceras de las calles vascas. Todo ha quedado grabado en su memoria y en sus teléfonos móviles. Ser Deportivos ha reunido, en el espacio Spiuk en Bilbao, a tres grandes ex corredores, Ivan Mayo, Igor Astarloa y David López, para valorar estos intensos días que se han vivido en Euskadi.
Experiencia irrepetible
El Tour ha dejado un muy buen sabor de boca. "Hay que disfrutar también de la resaca que deja el Tour. Ya han pasado unas horas, se está tranquilizando todo, pero para la ciudad, para el Tour y para el ciclismo en general ha sido una experiencia irrepetible. El tour se ha hecho de rogar, pero la experiencia ha hecho que todo el mundo salga ganando. No ha habido ni un problema en las cunetas. Ha sido incluso menos peligroso que el inicio con una etapa llana. La carrera sale de aquí reforzadísima y con un gran interés del aficionado en general", apunta David López, ex ciclista de Euskaltel entre otros equipos.
Iban Mayo, que bien sabe lo que es ser agasajado en el Tour del 2003 cuando ganó en Alpe d´Huez, tenía claro que la afición no iba a fallar. "El tour sabía que jugaba sobre seguro. Sabían que la afición iba a responder y así ha sido. Yo estuve el sábado en la salida de Bilbao y es que ni en la Aste Nagusía he visto tanta gente. Ha sido una cosa increíble. A Amorebieta ni me acerqué porque me daba miedo. Ha habido gente en todos los sitios y el Tour ya lo sabía. Ha sido una locura, pero para bien. El tour lo va a tener en cuenta porque ha sido épico", apunta el que fuese también corredor de la escuadra naranja.
Igor Astarloa sí se acordaba de lo pronto que ha terminado la carrera para Enric Mas y para Richard Carapaz. "Es la única pena. Han sido los líderes de dos equipos con lo que eso significa. Se han ido para casa dos animadores de la carrera. Yo, no habiendo corrido ningún Tour, ha sido espectacular. Además, la mayoría de los corredores conocían las carreteras y eso se ha notado en la lucha que hemos visto en la primera y en la segunda etapa. Las imágenes que se han visto de la afición y toda la publicidad que se ha hecho ha sido muy beneficiosa para el ciclismo", apunta el que fuese campeón del mundo en 2003.
Tres imágenes
Mayo tiene muy claro con que imagen se queda de todo lo que ha vivido. "Es difícil porque ha habido tanta gente en tantos sitios, pero guardo las imágenes de San Juan de Gaztelugatxe y de Lekeitio. La pena fue que el día no acompañó en lo meteorológico, fue un día un poco triste. Me quedo con lo que viví en la recta de un kilómetro en Abadiño, allí me junté con Beloki y Horrillo. Fue increíble, había gente hasta en doble fila viendo pasar a los ciclistas", recuerda.
Para Astarloa la fotografía es la de la subida a Pike Bidea. "Ese camino que se hizo entre la gente parecía que era de una clásica. Fue impresionante". David López, con cuatro tours a sus espaldas, el recuerdo que guarda tiene que ver con la llegada a Bilbao. "El último kilómetro fue espectacular. Fue un gran acierto colocar la meta en Etxebarria después de las curvas del Ayuntamiento. No fue la típica llegada en ciudad con un sprint. Todo ese trozo final de la etapa hizo más espectacular a la llegada en Bilbao", apunta.