La huelga en Hollywood resuena en Euskadi: los actores vascos se sensibilizan ante los temores en común en la industria audiovisual

San Sebastián

Con Hollywood en una crisis sin precedentes, la industria del entretenimiento sufre estos días la suspensión de producciones a la que siguen los estragos en la planificación de proyectos a nivel internacional, entre ellos coproducciones que, a pesar de tener previstas localizaciones en Euskadi, no se han llevado a cabo. "No son solo guionistas y actores, lo afectados son todos, eléctricos, maquillaje, peluquería, vestuario", indica el actor donostiarra Josean Bengoetxea, parte de la Euskal Actoreen Batasuna, "más allá de que pueda afectarnos o no, nos afecta sensiblemente, como puede pasar en otros sectores", añade.

Si bien la huelga de guionistas ya había impactado en la producción televisiva, la adhesión de SAG-AFTRA ha exacerbado la crisis, cuyo final no se espera a corto plazo. La ausencia de actores no solo ha detenido la producción y el rodaje de películas, sino que también ha afectado la promoción de proyectos ya finalizados. con todo, Euskadi, asegura, sigue siendo un destino atractivo para coproducciones cinematográficas. "Se sigue produciendo mucho cine y de mucha calidad, las productoras vienen a Euskadi y, a pesar de alguna cancelación, la producción continua a buen ritmo desde hace unos cuentos años y no parece que vaya a cambiar", explica.

Entre ellas, el rodaje estos días en Bilbao del primer largometraje de Sara Fantova, y tendrá lugar, en parte, en plena Aste Nagusia. Una historia rodada en euskera y protagonizada por Olaia Aguayo y Bengoetxea como su aita. Además de programas de productoras extranjeras procedentes de Australia, Canadá Japón o Francia relacionados con turismo o gastronomía que han tenido lugar este año.

En paralelo, la presión aumenta tanto en los sindicatos como en los estudios de Hollywood para encontrar soluciones viables que permitan la reanudación de la producción y el regreso de las películas y series a la pantalla.

La decisión de SAG-AFTRA de declararse en huelga fue tomada después de que las negociaciones con los estudios de Hollywood para un nuevo convenio colectivo fracasaran. El gremio exige un aumento en la remuneración base para sus miembros, teniendo en cuenta los desafíos planteados por la inflación y la evolución del mercado debido a la proliferación de plataformas de "streaming". Además, se solicita una regulación de los derechos de imagen en relación con la inteligencia artificial y la cobertura de los costos de audiciones autograbadas".

En Euskadi, hay temores compartidos. Cada actor negocia a través de una sociedad de gestión sus derechos de imagen, no así en la industria norteamericana. Si bien los datos facilitados por las plataformas de streaming "se están cuestionando mucho". "Aquí estamos alerta y se lleva a cabo un trabajo ímprobo por que los datos sean transparentes".

Se añade otra realidad que también cala en el territorio. El uso de la Inteligencia Artificial hace años que está presente en el sector y trae consigo "un debate ético". "Es algo que timidamente se lleva a cabo en Euskadi, en figuración por ejemplo si necesitas 800 figurante para completar un frontón, ruedas un tercio y en postproducción esas cifras se triplican", explica Bengoetxea que cree firmemente en la sensibilidad de los autores frente a la automatización de tecnologías que pretender rentabilizar las producciones y "ahorrar a costa de contrataciones".