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Cuando un grupo de pelotazales impulsó la pelota vasca en Zaramaga

Tras la construcción del frontón en 1974, se inició en Zaramaga la actividad pelotística con el concurso de varios pelotazales. Su primer triunfo de importancia lo consiguieron en 1977

Zaramaga ganador del Torneo M. Millán en 1977

Vitoria-Gasteiz

A mediados de los setenta del pasado siglo, se construyeron en Vitoria tres frontones, en otros tantos barrios vitorianos: Zaramaga, Adurtza y Abetxuko. Hasta entonces la actividad pelotazale en la ciudad, se centraba casi exclusivamente en el Frontón Vitoriano, de la calle San Prudencio. La cancha estaba controlada por la empresa de pelota profesional, que tenía preferencia en su utilización, y por tanto había pocos huecos para conseguir horas para la pelota aficionada, sobre todo los sábados y domingos.

Javier Arrizabalaga Yoldi, presidente de la Federación Alavesa de Pelota Vasca, vio en esos nuevos recintos la oportunidad de extender la práctica de la pelota, y “fichó” para ello en 1974 a Juanjo Azpiazu, para que se encargara de poner en marcha un club, en el barrio vitoriano de Zaramaga.

Javier había elegido bien; Juanjo era un pelotari senior de mano, que se había trasladado a Vitoria por motivos laborales, y tenía una dilatada experiencia desde niño en su anterior club, en Legutio. Conocía de cerca, como se estructuraba una entidad deportiva, como se organizaban las competiciones y los entrenamientos, como se enseñaba la técnica del juego y otros aspectos.

Zaramaga, era y es un barrio con numerosa presencia de personas venidas a nuestra ciudad, de Navarra, de Castilla y de otros territorios, que consiguieron trabajo en el “boom” industrial de la Vitoria de aquellos años. Entre aquellos trabajadores había numerosas personas que jugaban a pelota a mano. Así que Azpiazu encontró en ellos a un grupo dispuesto a colaborar, al que se unieron otros pelotazales nativos, todos ellas deseosos de contar con una cancha para desarrollar la actividad, y no depender del apuntado “centralismo” del Frontón Vitoriano.

Dirigentes de la pelota en Zaramaga

Dirigentes de la pelota en Zaramaga

Aquel primer grupo de Zaramaga, lo formó un equipo que se distribuyó las diversas responsabilidades entre sus miembros: los entrenamientos, la planificación y desarrollo de las competiciones, la adquisición de material deportivo, los jueces de cancha, los patrocinios, etc.

Muchos niños y jóvenes del barrio se apuntaron a los ensayos, uniéndose a los veteranos que practicaban el juego, y en muy poco tiempo se desarrollaron las primeras competiciones de carácter social, para lo que hubo de conseguirse la ayuda económica de entidades públicas y privadas, con el fin de cubrir los costes que se originaban.

A medida que el club creció, los pelotaris de Zaramaga pasaron a intervenir de forma individual o como equipo, en competiciones de carácter provincial, regional, e incluso estatal.

El ambiente en las gradas era magnifico; muchos vecinos del barrio acudían los sábados y domingos, a presenciar los interesante partidos que se programaban, y se tomaban algún “pote” en el improvisado ambigú que se montó en el frontón, a fin de conseguir algunos ingresos extras. Hasta el guardia municipal, encargado de la seguridad en la zona, se pasaba por el frontón para echar un vistazo a alguno de los partidos.

Finalistas del Torneo de Zaramaga en 1979

Finalistas del Torneo de Zaramaga en 1979

DIRIGENTES Y PELOTARIS

La mayoría de aquellos dirigentes, compatibilizaban su labor de directivos, con la practica de la pelota a mano. Tengo muy buenos recuerdos de aquella gente, entre ellos del zamorano Agustín Pérez Medina, por su tenacidad y su peculiar estilo de “sobaquillo”, para golpear la pelota. Me dijo en una ocasión, que se retiró de la participación en

competiciones, por un comentario que le dediqué en un diario local donde yo escribía, que decía que “ya no estaba para esos trotes”. Ahora pienso, que hay que ser mas moderado en las criticas y que me excedí en mis apreciaciones.

Juanjo Azpiazu, tuvo una gran dedicación a la causa como dirigente, con el que trabé una gran amistad que perdura. El fue el que me “enchufó” el papel de secretario, en aquel grupo. Andrés Quintana, alavés del Valle de Arana y Otxoa fueron unos jueces de cancha que tomaban las decisiones sin ningún atisbo de duda, a los que acompañaban en esa tarea entre otros, los sorianos Eugenio y Cayo Dueñas Cuscurita.

Los partidos de los torneos sociales de Zaramaga causaban una gran expectación, entre ellos los que disputaban los navarros hermanos Borda Remiro, que siempre lo hacían con la sangre hirviendo como si se tratara de una final, sobre todo cuando jugaban un partido entre ellos.

Los hermanos Borda, Fernando Enríquez y Agustín Pérez

Los hermanos Borda, Fernando Enríquez y Agustín Pérez

Aquellos comienzos dieron pronto como fruto una serie de pelotaris, que compitieron con la élite manista aficionada del territorio, enfrentándose en la cancha con los mejores, como Murga y Furundarena, el primero de los cuales fue profesional durante unos años. Varios de ellos en edad juvenil, además de jugar campeonatos, colaboraron en diferentes facetas dentro del club.

NOVEDADES IMPLANTADAS

El club de pelota de la localidad alavesa de Legutio, fue pionero en crear una escuela de chicas raquetistas. Una de ellas, Maribel Aldasoro, fue contratada como profesional en 1970 por la empresa que regentaba el Frontón Madrid, de la capital del Reino, permaneciendo varios años en el cuadro formado por treinta raquetistas. Isabel Azpiazu, también fue requerida para firmar el correspondiente contrato, pero sus padres no se lo permitieron.

En 1975, con entusiasmo y dedicación, Pepe Gutiérrez emulando al club legutiarra, inició en Zaramaga la preparación de un pequeño grupo de chicas, interesadas en practicar la modalidad de raqueta en frontón. En abril de 1976 hicieron su presentación, disputando su primer partido oficial, que tuvo su continuidad con su participación en los torneos organizados por el club. Pepe fallecía el 16 de octubre de 1977, tras padecer una rápida y grave enfermedad, y tras la desaparición de su mentor, la sección de raquetistas no tuvo continuidad.

Raquetista de Zaramaga y Pepe Gutiérrez

Raquetista de Zaramaga y Pepe Gutiérrez

En los torneos sociales, se llevó a cabo una interesante novedad, instaurándose en 1980 el torneo de pelota de mano individual, dentro del cuatro y medio, en el que en la final Marañón venció por 18 a 14 a Azpiazu. Esta modalidad no disputaba su campeonato en el campo profesional desde 1958, y no se recuperó hasta 1989.

LAS 24 HORAS DE PELOTA

En mayo de 1979, el club de Zaramaga desarrolló una manifestación deportiva, titulada “Las 24 horas de pelota vasca”, que consistió en que durante ese espacio de tiempo, ininterrumpidamente se celebrarán partidos de pelota a mano y herramienta. El primer partido se disputó el sábado día 12 a la una del mediodía, siendo finalmente 25 las horas utilizadas, ya que el último partido finalizó a las dos de la tarde del domingo. Se disputaron un total de treinta y dos partidos en los que intervinieron ciento doce pelotaris.

Hacia las doce de la noche del sábado hubo una bonita confrontación a mano por parejas, que disputaron Zubillaga y Alabide (Arrasate) y Dueñas I y Domezain (Zaramaga), siendo muy numerosa la presencia de espectadores, ya que el delantero Zubillaga era un manista que había actuado en el campo profesional.

Por otro lado no faltaron partidos con apuestas de por medio, en uno de los cuales celebrado a las cuatro de la madrugada, que hacia el número veintiuno, se jugaron un cordero en un mano a mano, el navarro “Ciclón Borda” y el zamorano Fernando Enríquez.

Algunos de los participantes no renunciaron a su habitual sábado de jolgorio y alterne, y directamente tras el poteo y el bailoteo se presentaron en la cancha, disputando sin ningún contratiempo el partido que les correspondía.

Todos los pelotaris que intervinieron en aquel evento, recibieron un diploma acreditativo de su participación, que les fue entregado una semana después en la cancha del frontón de Zaramaga, coincidiendo con la disputa de unos partidos del Torneo Social.

Las 24 horas de pelota

Las 24 horas de pelota

PRIMER TRIUNFO DE PRESTIGIO

Aquella labor continuada, supuso que muchos jóvenes que iniciaron su andadura como pelotaris en Zaramaga, alcanzaran un nivel aceptable y destacaran, lográndose disponer de un grupo interesante, entre los que recuerdo a Madrazo, Polanco, Villullas, Lain, “Rioja”, Aguinako, Ricardo Fernández “Izarra II”, Bikendu Jiménez y Gabilondo, este último especialista en la botibolea inventada por el profesional Panaderito de Oion..

En 1977 se disputó el Trofeo Manolo Millán, con participación de varios clubs y pueblos de la provincia. La competición, en la que se intervenía como equipo, iba destinada a la modalidad de mano parejas en las categorías de infantiles juveniles y seniors.

Tras las correspondientes eliminatorias accedieron a la final Zaramaga y Baños de Ebro. El equipo riojano alavés había reinaugurado su frontón el año anterior y disponía de una buena plantilla de pelotaris.

Los partidos de esa final fueron disputados el 9 de octubre en el Frontón Vitoriano, cancha hoy desaparecida que estaba situada en la calle San Prudencio. Se registró una buena entrada, con la asistencia de seiscientos espectadores y con una notable animación por parte de los seguidores de ambos equipos.

En el primer partido de infantiles hubo una dura y equilibrada lucha que duró cuarenta y cinco minutos, con varios tantos de larga duración y con exhibición de una gran calidad por parte de los protagonistas: Villullas y Polanco de Zaramaga y Berzal y Otero de Baños. El marcador estuvo igualado en los tantos 1, 3, 4, 5, 6, 8, 9, 13, 17 y 20, alcanzando la victoria los riojano alaveses por 22-20. Al finalizar el partido los pelotaris fueron despedidos con grandes aplausos, por su entrega total.

En juveniles, intervinieron por parte de Zaramaga, Gabilondo, -el mentado botiboleista-, y Ricardo Fernández “Izarra II”, ´-la estrella de la zaga-, representando a Baños, Muñoz y Blanco. El delantero gasteiztarra lograría nueve tantos de saque, y con la notable actuación de su compañero, un “segurola”, la pareja lograría ganar el partido por una gran diferencia, 22-4. La final quedaba empatada a una victoria y el triunfo en el último partido de senior, daba el título de txapeldun al equipo que lo consiguiera.

Agustín Pérez y Juanjo Azpiazu defendieron a Zaramaga y Pascual y Sáez a Baños de Ebro. La pareja vitoriana compuesta por un correoso y experimentado delantero y un zaguero incansable, logró una amplia victoria por 22-7, con la cual Zaramaga conseguía ganar el torneo.

La alegría se desbordó entre los pelotaris, técnicos, seguidores y dirigentes del club del barrio vitoriano. Tras unos años de modesto y continuado trabajo en las categorías inferiores, se había conseguido el primer título importante.

Cayo Dueñas, uno de los integrantes del club de Zaramaga, sería el que recibiría el trofeo destinado al equipo campeón. En la fotografía que aquí reproducimos, se refleja su gesto de satisfacción en la entrega del galardón.

Cayo Dueñas de Zaramaga, recoge el trofeo de ganador

Cayo Dueñas de Zaramaga, recoge el trofeo de ganador

Entonces la pelota vasca tenía muchos seguidores, y la noticia del triunfo fue publicada en la primera pagina del diario Norte Exprés, al lado de la información sobre el partido disputado por el Deportivo Alavés, en el que jugaban Morgado, Astarbe y Valdano.

Diario Norte Exprés

Diario Norte Exprés

OTROS TORNEOS

En 1975 catorce amigos de Zaramaga crearon la Peña Amalau, que desde ese año

disputó su propio campeonato de mano por parejas, que se prolongó durante diez temporadas. Tenían reservada una hora de cancha todos los domingos del año para entrenarse, cuyo coste corría a su cargo, así como el de los trofeos y otros gastos que originaba la competición.

Otro campeonato de prestigio organizado por el club de Zaramaga, fue el Torneo Aguilar, patrocinado por Enrique Aguilar Arenas, quien llegó a ser presidente de la Federación Alavesa. Esta competición que comenzó en 1977, llegó a alcanzar una participación de 400 pelotaris, de los territorios de Álava, Gipuzkoa y Navarra, y para su desarrollo se llegaron a utilizar tres frontones: Zaramaga, Agurain y Amurrio. En alguna edición se disputaron las finales en el frontón Ogueta.

Cartel Torneo Aguilar / Fundación Sancho El Sabio

Cartel Torneo Aguilar / Fundación Sancho El Sabio