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Bilbao cambiará el Plan General de Ordenación Urbana para limitar más la concentración de pisos turísticos en el Casco Viejo

La Asociación Vecinal Bihotzean ha llevado al pleno una proposición en la que demandaba al gobierno municipal la adopción de las medidas necesarias para controlar la proliferación de viviendas turísticas en la ciudad

Plaza de Unanumo, Casco viejo de Bilbao

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El Ayuntamiento de Bilbao realizará la modificación necesaria del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) a fin de limitar más la concentración de alojamientos turísticos en los barrios de la Villa, teniendo en consideración los datos del sector por barrios y distritos, según se recoge en una iniciativa del equipo de gobierno de PNV y PSE aprobada en el pleno de este jueves.

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La Asociación Vecinal Bihotzean ha llevado al pleno una proposición en la que demandaba al gobierno municipal la adopción de las medidas necesarias para controlar la proliferación de viviendas turísticas en la ciudad.

En la iniciativa del equipo de gobierno, que ha salido adelante, se recoge también el compromsio de trabajar, con el resto de administraciones competentes, en el desarrollo e implementación del nuevo Reglamento Europeo de Alquileres de Corta Duración para "aprovechar las nuevas herramientas que ofrece para mejorar y regular el intercambio de datos y la capacidad sancionadora" y poder así realizar "un control más exhaustivo de la actividad de las viviendas y habitaciones turísticas".

El equipo de gobierno impulsar, con el resto de administraciones competentes y con el sector, "la creación del instrumento fiscal oportuno a las estancias turísticas para el desarrollo sostenible del sector".

En su intervención, el representante de la Asociación Vecinal Bihotzean han manifestado que los vecinos han dejado de ser "sujetos y beneficiarios de las políticas públicas, que ahora se diseñan bajo los intereses de lobbies turísticos inmobiliarios".

"Nuestro barrio y, por ende, las personas que lo habitamos, nos hemos convertido en un producto de consumo y mediante plataformas, durante años y bajo el amparo de instituciones públicas e intereses económicos privados, se han estado desviando casas al mercado turístico, reduciendo la oferta para los vecinos y acarreando el aumento imparable del precio de los alquileres", ha denunciado.

En esa línea, ha asegurado que "son muchos los vecinos que se están viendo obligados a abandonar el Casco Viejo porque no pueden pagar las nuevas rentas, porque tienen en su edificio un tránsito constante de personas que no conocen y que rompen el tan importante sentimiento de comunidad o porque generan tanto ruido y molestias que la vida se hace insoportable".

Asimismo, ha advertido que, "además del crecimiento del número de viviendas turísticas legales, tenemos una descontrolada e ingente cantidad de viviendas turísticas ilegales", pero "las instituciones miran hacia otro lado porque están primando otros intereses".

Grupos municipales

En el turno de intervención de los grupos municipales, el concejal de Elkarrekin Bilbao Xabier Jiménez ha afirmado que "la situación descontrolada de las viviendas turísticas y el fraude de las mismas tiene consecuencias para los vecinos de los barrios de Bilbao, porque este tipo de negocios fuera de la regulación secuestran parte de la oferta de vivienda para alquiler habitual y eso supone una merma de la oferta de vivienda en alquiler para los vecinos y, por tanto, un encarecimiento del acceso a la vivienda habitual".

Además, ha apuntado que para las administraciones públicas estas prácticas suponen "un enorme coladero de carácter fiscal para la hacienda foral y también para municipal".

La portavoz del PP, Esther Martínez, ha dicho que es evidente que el número de viviendas turísticas en Bilbao "va creciendo de manera desproporcionada y también desproporcionadamente, porque cada vez hay más alojamientos que aparecen como irregulares", con lo cual "está habiendo un fallo más que evidente".

"No tiene ningún sentido que desde el año 2019 cada vez haya un mayor número de alojamientos que se ofertan y que, sin embargo, no están registrados como viviendas turísticas", ha valorado, para considerar que hay "una desidia y una negligencia evidente por parte de las administraciones públicas, y no por mirar hacia otro lado se va a arreglar".

A su entender, "no puede ser que, estando aumentando el número de viviendas turísticas, el número de inspectores que están atendiendo a estas labores sea exactamente la misma".

Por su parte, la concejal de EH Bildu Garazi Perea ha dicho que "no hace falta ver números, porque no hay más que pasearse una tarde por las Siete Calles para entender lo que hoy nos cuentan los vecinos".

"El turismo para ciertos barrios de esta ciudad, y especialmente para el Casco Viejo, se está convirtiendo en una carga para los vecinos y no está revirtiendo de una manera justa y equitativa en la comunidad", ha manifestado, para afirmar que "es hora de asumirlo y tomar medidas".

En ese sentido, se ha congratulado de que, con su enmienda, el equipo de gobierno "reconoce que hay un problema" y que es necesario "tomar medidas" porque en Bilbao "hay más oferta de alquiler de pisos turísticos que de vivienda habitual, y muchos de ellos son ilegales", ya que hay "967 en el registro oficial y hay más de 1.200 pisos para alquilar" en plataformas de alojamientos turísticos.

Gobierno

Por parte del gobierno municipal, el concejal de Desarrollo Económico, Comercio, Turismo y Empleo, Xabier Otxandiano, ha reconocido que el de las viviendas turísticas o habitaciones en pisos turísticos es un fenómeno "relativamente reciente, que ha sufrido un incremento en todas las ciudades de Europa y a nivel internacional".

Tras recordar que el propio Ayuntamiento de Bilbao, tanto en el PGOU como el PER del Casco Viejo, estableció ya una regulación específica, Otxandiano ha dicho que "una cosa es la reflexión, que la vamos a hacer y estamos abiertos, y otra cosa es la demagogia que yo estoy viendo y la virulencia en un relato que no se ajusta a la realidad".

Según ha dicho, el 0,68% de las vivienda de Bilbao están en la oferta turística, porcentaje que sube al 1,33% en el Casco Viejo y al 1,04% en Abando, "por motivos evidentes".

Otxandiano ha asegurado que "hay inspección" y ha dicho que el Gobierno vasco "hizo 1.117 inspecciones y abrió 376 expediciones sancionadores".

Tras reconocer que "seguro que sí debemos mejorar y realizar las modificaciones oportunas en el plan general o en el PER", ha recordado que el reglamento que ha aprobado el Parlamento Europeo y que se traslaraá a normativas estatales y luego autonómicas y locales, "va a obligar a las plataformas a comunicar exactamente dónde están estas viviendas, de manera que tendremos un control perfecto de dónde están y de si cumplen o no con la Ley Básica de Turismo, con el Plan General o con el PER".

En cuanto a la tasa turística introducida en la enmienda del equipo de gobierno, Otxandiano ha recordado su apuesta por una "tasa local" que "no se dedicará a la promoción del turismo, sino a inversiones en la ciudad y en los barrios que obviamente tengan una mayor carga e intensidad turística".

Por su parte, el concejal de Planificación Urbana, Proyectos Estratégicos y Espacio Público, Asier Abaunza, ha apuntado que Bilbao tiene 11,6 plazas de viviendas turísticas por cada mil habitantes, "frente a la media del Estado de 36,1".

"Aunque hemos tomado ya medidas en el plan general para que no se desboque este tipo de actividades como una cuestión preventiva y estamos dispuestos a tomar más medidas preventivas, ni es un problema, ni estamos en una situación de turistificación de la ciudad, ni nada parecido", ha manifestado.