Sociedad

Osakidetza quiere menos medicamentos y más terapia para conciliar el sueño

En 2025 va a poner en marcha en Álava un proyecto piloto para rebajar el consumo de medicamentos para dormir

Atractive mature man with beard lying on bed using digital tablet. / Ignacio Ferrandiz Roig

Euskadi- junto con el resto del estado- está a la cabeza mundial de consumo de medicamentos para dormir. Casi la mitad de los vascos y vascas tienen o han tenido problemas para dormir y se estima que un 15 por ciento son insomnes crónicos, es decir, personas que llevan largos periodos de tiempo sin dormir de manera adecuada lo que influye de manera negativa en su día a día. La preocupación por el abuso, en muchos casos, de este tipo de medicamentos -ansiolíticos e hipnóticos- está en la mesa de las diferentes instituciones que estudian qué medidas poner en marcha para rebajar ese consumo. Preocupa el abuso de los medicamentos y también la cronificación. "Este tipo de medicamentos no están indicados para ser administrado más allá de cuatro a seis meses y la gente lleva de cuatro a seis lustros tomándolos", apunta el responsable de la Unidad del Sueño de la OSI Araba, Carlos Egea, que afirma que es frecuente que "a consulta lleguen personas que llevan diez años tomando de manera continuada estos medicamentos".

También los adolescentes

Además de la cronificación de estos medicamentos, otra cuestión que preocupa es que su uso se está trasladando a edades cada vez más tempranas. De hecho se estima que un 15% de los y las adolescentes vascos los consumen. "Estamos en el país que más consume ansiolíticos para dormir así que los descendientes de quienes los toman ya están empezando a tomarlos; los adolescentes ya no solo toman bebidas para no dormirse, sino fármacos para dormir", apunta Egea que cree que "esto ya empieza a llevar tintes extraños de progresión en el aumento de el fármacos".

Más terapia

Por eso el año que viene, se quiere poner en marcha, en una centro de salud de Álava todavía por determinar, un proyecto piloto que haga más sencillo que los insomnes crónicos- un 15% del total- accedan a terapias cognitivas y rebajen el consumo de este tipo de medicamentos. "Lo que queremos es impulsar la terapia cognitiva conductual para el insomnio, que sería la primera línea de tratamiento, pero que es complicada de ofrecer en el sistema de salud que tenemos; lo ideal sería que se pudiera llevar a la atención primaria", apunta Ainhoa Álvarez, médica adjunta de neurofisiología de la Unidad del Sueño. "Primaria es el primer filtro que pasa un paciente con insomnio, y ahí tendríamos que poder ofrecerles esa terapia", apunta la doctora. A través de este tipo de terapia cognitivas se trabajaría, de la mano del paciente, pautas de sobre el sueño y descanso y hábitos de vida y, además, se abordarían las dificultades vitales que la persona afronta en su día a día.

Otra posible herramienta que se estudia para rebajar el consumo de fármacos es que salte una alarma en las farmacias ante casos de abusos de medicamentos por parte de los clientes. Y, además, hay se quiere que se pueda ofrecer esta terapia en atención primaria.