La restauración del Castillo de Butrón

Bilbao

Visitamos en SER Viajeros una de las joyas arquitectónicas de Euskadi, el Castillo de Butrón, que se encuentra en pleno proceso de restauración. Esta fortaleza, que parece sacada de un cuento de hadas, se encuentra en Gatika, en Bizkaia, muy cerca de la reserva de la biosfera de Urdaibai, a medio camino entre Bilbao y San Juan de Gastelugatze, el Rocadragón de la popular serie Juego de Tronos.

El castillo de Butrón ha pasado por muchas vicisitudes a lo largo de su historia. Se construyó sobre una antigua casa-torre medieval y estuvo abandonado durante unos 300 años hasta que lo reconstruyó el marqués de Cubas a finales del siglo XIX. Hace unos años se utilizó como escenario de espectáculos medievales y en 2021 lo adquirió un matrimonio ruso que lo está rehabilitando.

La arquitecta encargada de su restauración Verónica Quintanilla nos cuenta en SER Viajeros que se está haciendo básicamente un lavado de cara respetando al máximo el aspecto del castillo romántico del siglo XIX. Durante las obras se han encontrado importantes restos arqueológicos que se está catalogando para ponerlos a disposición de las instituciones públicas y los investigadores.

El castillo de Butrón nos traslada a la Edad Media, a las guerras de banderizos, como explica el director del museo diocesano de arte sacro de Bilbao, el historiador especialista en la edad media en Bizkaia, Juan Manuel González Cembellín. Según nos cuenta, los orígenes de la familia Butrón se remontan al siglo VIII y fue el V señor de Butrón quien construyó la fortaleza medieval hacia el siglo XIV sobre la antigua casa-torre de la familia.

Cuando se acabaron las guerras de banderizos, a principios del siglo XVI, el castillo quedó abandonado y se fue deteriorando hasta que a finales del siglo XIX es restaurado adquiriendo la forma actual. El marqués de Torrecilla encargó el proyecto al arquitecto Francisco de Cubas, que en 1878 lo reconstruyó al estilo romántico de los castillos de Baviera siguiendo los criterios imperantes en la época en Europa.

Estudios Arriaga compró el castillo en 1989 para convertirlo en un atractivo turístico, en el que se revivieron durante unos años las justas medievales para deleite de los visitantes, pero la empresa acabó quebrando. La fortaleza se sitúa sobre una colina, rodeada por un bosque junto al río Butrón que resulta ideal para disfrutar de un día perfecto de esparcimiento, acercándonos a la historia de Bizkaia.