Más de 2.900 viviendas de Bilbao están en manos de grandes tenedores: el Ayuntamiento busca movilizarlas ante el mercado tensionado

Bilbao cuenta con 2.915 viviendas controladas por grandes tenedores, lo que representa el 2% del parque total de viviendas del municipio. Así lo ha revelado la concejala de Vivienda, Yolanda Díez, durante su comparecencia ante la comisión municipal en la que ha defendido la solicitud para declarar a la ciudad como "zona tensionada".

Entre los grandes tenedores identificados, 618 personas físicas o jurídicas tienen entre cinco y diez inmuebles, mientras que 112 propietarios poseen once o más viviendas. Este fenómeno se distribuye por todos los distritos y tiene un impacto directo en la evolución del mercado del alquiler y en el acceso a la vivienda para la mayoría de la población.

El precio medio del alquiler en Bilbao supera los 820 euros mensuales

La renta media de alquiler en Bilbao se sitúa en 820,30 euros al mes. Según la edil, el mercado inmobiliario local muestra una tendencia claramente alcista que "es inasumible para la ciudadanía". En los últimos seis años, el precio medio de la vivienda usada ha subido más de 20.000 euros, mientras que las promociones de vivienda nueva superan ya los 400.000 euros de media.

Esta dinámica ha llevado al Ayuntamiento a considerar la declaración de zona tensionada como una herramienta necesaria. "No es la solución definitiva, pero es una medida de contención", ha dicho Yolanda Díez, quien subraya que "no es una medida contra nadie, sino a favor de la mayoría que necesita vivienda a precio razonable".

Bilbao cumple con los criterios para ser zona tensionada

La Ley estatal de Vivienda permite declarar zonas tensionadas cuando la carga del coste de la vivienda (hipoteca o alquiler más suministros) supera el 30% de los ingresos del hogar. En Bilbao, esa media se sitúa en el 30,24%. En distritos como Begoña (34,47%), Rekalde (33,33%) u Otxarkoaga-Txurdinaga (32,69%) la presión es aún mayor.

Solo Abando queda por debajo del umbral, con un 22,60%, pero se ha optado por incluirlo en la solicitud municipal para evitar efectos secundarios en el conjunto del municipio.

Plan de acción: cinco ejes, 14 estrategias y 40 acciones

El Ayuntamiento de Bilbao ha diseñado un plan de acción que acompañará a la solicitud de declaración como zona tensionada. Se articula en torno a cinco ejes estratégicos, 14 líneas de actuación y 40 acciones concretas. Entre ellas, destaca la promoción de 1.090 nuevas viviendas públicas, de las cuales 890 las construirá el Gobierno Vasco.

Además, se prevé impulsar 200 alojamientos dotacionales y otras 158 viviendas en régimen de alquiler asequible en colaboración público-privada, en zonas como Zorrozaurre. El inventario de suelos y un plan de inversiones a 10 años también forman parte de la estrategia.

Movilización de vivienda vacía y control de precios

El Ayuntamiento aspira a movilizar unas 400 viviendas vacías mediante subvenciones a la rehabilitación, programas de intermediación y el uso del canon previsto por ley. La actuación sobre grandes tenedores será dialogada, según ha explicado Díez, sin priorizar la vía sancionadora aunque recordando que "la ley recoge medidas coercitivas".

También se avanzará en un índice de referencia de precios que podría estar disponible en invierno si el Ministerio lo incluye en la publicación prevista para julio. Esta herramienta facilitará la contención de precios, aunque "no servirá para bajarlos", ha admitido la concejala.

Reacciones políticas al plan municipal

La propuesta del equipo de Gobierno ha suscitado diversas reacciones. Desde Elkarrekin se ha criticado no haber podido participar en la elaboración del plan, pero se ha valorado positivamente que incluya a todo el municipio. EH Bildu considera que el plan "llega tarde" y pide ampliar el canon a todas las viviendas vacías, no solo las de grandes tenedores.

El PP ha calificado las políticas municipales como un "sonoro fracaso" y ha propuesto un enfoque completamente diferente para abordar el problema de la vivienda. Por su parte, el PNV ha reconocido que esta declaración no es "una medida mágica", pero sí un paso más dentro de una batería de acciones para frenar la especulación y mejorar el acceso a la vivienda.

Inversores con múltiples pisos, bajo la lupa municipal

La actuación sobre grandes tenedores es una de las claves del plan. El Ayuntamiento cifra en 730 los propietarios con cinco o más viviendas en Bilbao. Aunque no todos ellos concentran propiedades a gran escala, su peso en el mercado es significativo.

La edil Yolanda Díez ha insistido en que la colaboración será la vía preferente, pero también ha recordado que existen mecanismos para intervenir si no se logra avanzar por la vía voluntaria. Las herramientas incluyen desde el canon de vivienda vacía hasta límites al precio del alquiler para grandes tenedores.

Esta estrategia busca desincentivar la acumulación especulativa de inmuebles y favorecer su entrada en el mercado, especialmente en barrios donde el impacto es más severo.

Vivienda como derecho y no como mercancía

Desde el Ayuntamiento se insiste en que la vivienda debe entenderse como un derecho y no como una mercancía. La proliferación de grandes tenedores y el aumento sostenido de precios hacen necesaria una intervención pública más decidida.

La hoja de ruta bilbaína pretende ser una respuesta integral: más vivienda pública, control del mercado privado, rehabilitación de lo existente y colaboración institucional. El reto ahora será la ejecución efectiva de las acciones planteadas y el seguimiento del cumplimiento por parte de los actores implicados.

La declaración de Bilbao como zona tensionada podría marcar un antes y un después en las políticas locales de vivienda. En un contexto de encarecimiento generalizado y oferta limitada, movilizar el parque existente y frenar dinámicas especulativas son pasos imprescindibles para garantizar el acceso a la vivienda para todos.