Idoia Postigo: "Es necesario incorporar saberes sociales a la construcción urbana"

El entorno urbano puede generar impactos positivos en el bienestar de las personas. Es cuestión de pensarlo y sobre todo de diseñarlo y trabajarlo, nos dice Idoia Postigo. Las ciudades pueden ser lugares de sanación y deben, ante todo, añade, ser generadoras de bienestar.

Con Postigo reflexionamos en Hora 14 Euskadi sobre el Seminario que esta semana ha organizado la fundación que preside. Una cita bajo el epígrafe "Humanizando las ciudades: La siguiente revolución urbana". En este encuentro reunía a cerca de un centenar de asistentes y de experiencias de ciudades europeas que buscan ese objetivo desde el turismo inclusivo, las infraestructuras de conexión metropolitana y la atracción de talento.

Idoia Postigo, directora general de Bilbao Metropoli 30, ha explicado que el objetivo era mostrar cómo el entorno urbano puede impactar positivamente en el bienestar de las personas: "Es cuestión de pensarlo y, sobre todo, de diseñarlo y trabajarlo". Subrayó que las ciudades pueden ser lugares de sanación y, ante todo, deben ser “generadoras de bienestar”.

Durante la entrevista, Postigo ha compartido su sorpresa y entusiasmo ante la intervención de Silvia Zimmermann, copresidenta del Club de Roma. Para Postigo, ha sido muy significativo ver cómo “una persona que vive prácticamente en el otro lado del planeta comparte muchas de las reflexiones que estamos impulsando desde Bilbao Metropoli 30”. Ha considerado que Zimmermann, filósofa y escritora, ha validado de alguna forma el enfoque de la asociación al hablar de una mirada más profunda que va más allá de lo físico: “Una mirada que analiza cómo convivimos las personas en estos entornos”.

Respecto a la incertidumbre y el caos de los tiempos actuales, como el mencionado apagón simbólico, Postigo ha destacado que la clave no está en evitar el desorden, sino en comprenderlo: “Silvia hablaba de la necesidad de no intentar evitar la inestabilidad y el caos, sino abrazarlo como parte de nuestra existencia”. Según ella, esto permite afrontar los desafíos con mayor calma y perspectiva.

En cuanto al enfoque de Bilbao Metropoli 30, ha remarcado que su trabajo busca pensar en el futuro de la metrópolis desde una reflexión pausada: “En unos tiempos en los que le damos mucha importancia a la urgencia y a la acción, pararse a reflexionar sobre cómo convivimos y qué lugar tiene la persona nos parece esencial”.

Uno de los aprendizajes clave de la pandemia, según Postigo, ha sido tomar conciencia del entorno y de cómo influye en el bienestar emocional: “Nos dimos cuenta de que cobra mucha importancia analizar cómo el entorno en el que vivo me hace sentir”. Ante el crecimiento de problemas como la soledad, la desconexión y las enfermedades mentales, ha insistido en que “el entorno urbano puede ayudar a generar un impacto positivo en el bienestar de las personas”. Ha afirmado que lo deseable sería que las ciudades no solo no enfermen, sino que “sean incluso lugares de sanación”.

Finalmente, ha explicado el nuevo reto de la asociación: la construcción de una red global de agentes del cambio urbano. “Queremos construir una comunidad internacional que llamamos Urban Revolution Aurrera”, una comunidad informal de personas comprometidas con la transformación de las ciudades. Postigo ha resaltado que se trata de compartir no solo conocimientos y experiencias, sino también fracasos, porque “los fracasos también son muy inspiradores y una gran fuente de aprendizaje”. En ese sentido, ha subrayado que seguirán enriqueciendo esta red mientras continúan con otros proyectos centrados en el presente y el futuro de la metrópoli.