Bilbao se prepara para una jornada histórica: taxis al límite por la llegada masiva de aficionados ingleses

El próximo 21 de mayo Bilbao se convertirá en un hervidero de emociones, movimiento y mucha expectación. Con la llegada de miles de aficionados ingleses por un importante partido de fútbol europeo, la ciudad se prepara para una jornada que promete ser tan intensa como inolvidable.

Entre los sectores más afectados por este aluvión de visitantes está el transporte urbano, y en especial, los taxis. En total, Bilbao cuenta con 775 licencias de taxi. La pregunta clave es: ¿está el sector preparado para lo que se viene?

Todos los taxis en la calle: una jornada sin descanso

Nos hemos acercado a una de las paradas del centro de la ciudad para hablar con quienes lo vivirán desde dentro. Uno de los taxistas con décadas de experiencia nos lo resume en pocas palabras: “Esto va a ser algo nunca visto”. El volumen de servicios puede alcanzar cifras récord.

“Ese día vamos a salir todos, absolutamente todos. Se va a permitir a todas las licencias trabajar sin restricciones”, nos cuenta. La orden es clara: refuerzo total del servicio. No habrá turnos ni descansos obligatorios. Todos los vehículos disponibles estarán operativos para responder a la demanda.

Un evento que supera lo vivido en la final de rugby

Para quienes piensan que Bilbao ya ha vivido días intensos —como la final europea de rugby—, el ambiente previo a este partido parece superar todas las previsiones. “Creo que va a ser incluso más grande que lo del rugby. El fútbol tiene más tirón, mueve a más gente, incluso más que la Aste Nagusia, dice entre risas, haciendo referencia a otras fechas de alta actividad en la ciudad.

El impacto no solo será visible en la carretera. Se prevé una ocupación total en hoteles, mayor actividad en bares, más presencia en las calles y un ritmo frenético en el transporte público y privado.

Paciencia y sentido común: las claves para la ciudadanía

El taxista también lanza un mensaje importante a la ciudadanía: “Vamos a trabajar todos. Habrá trabajo para todos, sí. Pero también pedimos un poquito de paciencia”.

Entre la gente que ya se mueve cada día por Bilbao y los miles que llegarán de fuera, el colapso puntual será difícil de evitar. “Que nadie se estrese. Va a ser un día de locos, pero también una oportunidad para mostrar lo bien que funciona esta ciudad cuando se organiza”, añade con tono optimista.

El aficionado inglés: activo, curioso… y muy usuario del taxi

Uno de los puntos que más se repite entre los profesionales del volante es el perfil del visitante que llega. “Los ingleses se mueven mucho. No se están quietos. Usan el taxi para ir de un lado a otro, para ver, para salir, para disfrutar”, explica el conductor.

Esto implica que, más allá del desplazamiento puntual al estadio, se generará una demanda continua durante todo el día. Los taxis serán pieza clave para absorber ese movimiento constante.

Una ciudad que se pone a prueba… y que quiere brillar

Bilbao ya ha demostrado en otras ocasiones su capacidad para gestionar grandes eventos. Esta vez, la cita futbolística no solo pondrá a prueba la logística urbana, sino también la coordinación y la hospitalidad de toda la ciudad.

Bares, comercios, policía local y transporte público están en alerta. Y los taxis, en el centro de la acción.

“Realmente vamos a salir todos. Y lo haremos con ganas”, concluye el taxista. “Ese día Bilbao va a latir más fuerte que nunca. Será una fiesta… y también una prueba de fuego. Pero estoy seguro de que vamos a estar a la altura.”