"Una cadena de negligencias institucionales facilitó el asesinato de nuestro hijo", denuncia la familia del joven al que mató un portero de discoteca en Vitoria

Vitoria-Gasteiz

Arantzazu y Roberto, los padres de Kerman, el joven que mató un portero de la discoteca Mítika de Vitoria, ahora en prisión, han remitido una carta a los grupos del Parlamento vasco en la que solicitan que "impulse las reformas necesarias" porque la muerte de su hijo "no fue un accidente", si no un "asesinato facilitado por una cadena de negligencias institucionales" y porque "Kerman merece justicia y la ciudadanía, garantías firmes de no repetición".

La carta señala expresamente al Ayuntamiento de Vitoria. Recuerda que en dicha discoteca los problemas "no los creaban los clientes, si no sus controladores de acceso" que "mostraban un patrón de violencia gratuita e indiscriminada, dentro de una dinámica instalada y tolerada", denuncia la familia.

Al menos un año antes

De todo esto y del "riesgo" que suponía, era "consciente" la Policía Local de Vitoria "al menos un año antes", subrayan en el escrito. En este sentido, consideran "se podrían haber iniciado expedientes, retirado acreditaciones o impuesto sanciones" y el Ayuntamiento de Vitoria "no puede escudarse en tecnicismos para eludir su responsabilidad".

"Si la interpretación de las leyes actuales genera dudas, creemos que ha llegado el momento de clarificarlas y reforzarlas" aseguran, por lo que piden al Parlamento vasco que actúe e "impulse las reformas necesarias" porque "Kerman merece justicia y la ciudadanía garantías firmes de no repetición".

Además, la familia reclama en su escrito "una mínima asunción de responsabilidad institucional" que "es lo menos que merece nuestro hijo y lo mínimo que la ciudadanía debería poder esperar".

La carta ha llegado a sede parlamentaria en la víspera de que el pleno debata este jueves una iniciativa de EH Bildu que pide revisar y endurecer la normativa de los porteros de discoteca.