"Parecían fuegos artificiales": la historia del irundarra Julen Esnaola durante el bombardeo de Irán a la base militar de EE.UU. en Qatar

Este lunes 23 de junio Irán bombardeó la base militar de Estados Unidos en Qatar a modo de respuesta tras el ataque de Donald Trump a Irán. El Ministerio de Defensa catarí confirmó en un comunicado en su cuenta de X que los misiles no causaron víctimas ni impactos, algo que también ha confirmado el Pentágono. Una situación que ha vivido muy de cerca el irundarra Julen Esnaola. El entrenador de porteros del Al-Sailiya fue testigo de los bombardeos en una situación de mucha tensión pero que, afortunadamente, se ha quedado en una anécdota.

El entrenador de porteros del Al-Sailiya se encontraba a punto de comenzar el primer entrenamiento de la pretemporada cuando vio unas luces en el cielo. "Parecían fuegos artificiales. Yo les dije a los porteros que había una fiesta cerca de la ciudad deportiva. Fue entonces cuando me dijo uno de los porteros, que es de origen palestino que no eran fuegos artificiales, que eran baterías antiaéreas que salían de la base militar de EE.UU.", ha explicado en Radio San Sebastián. En ese momento todos se volvieron a casa rápidamente, aunque no sin sorpresas. "De camino a casa, en la autopista, me encontré unas llamas espectaculares y era una de esas baterías antiaéreas que había caído sin explotar al lado de la autopista, parecía que estaba en un videojuego", ha explicado el irundarra.

Una situación surrealista que hizo que Julen tuviera que buscar soluciones de emergencia. "Paré en un supermercado de mi urbanización, llené el coche con víveres mientras escuchaba las noticias. Si continuaba el bombardeo tenía dos opciones, ir al metro, o al desierto". Ninguna de las dos opciones hizo falta ya que en las noticias comenzaron a informar de que Irán había avisado de los bombardeos y la Casa Real de Qatar había recibido un comunicado en el que Irán decía que no era un ataque al pueblo catarí, sino una respuesta a los Estados Unidos. Tras esta información, la situación se apaciguó y Julen pudo descansar. "Entendimos la situación y he dormido tranquilo. Ahora continuamos con nuestra vida normal, como si no hubiera pasado nada", ha contado en Radio San Sebastián.