Donostia activa un protocolo por la llegada masiva de carabelas portuguesas

El Ayuntamiento de Donostia / San Sebastián ha puesto en marcha un nuevo protocolo de actuación frente a episodios de carabelas portuguesas (Physalia physalis) en sus playas, tras la aparición masiva e inusual de ejemplares pequeños durante el mes de julio de 2025. El plan, elaborado por el área de Salud Ambiental y Sostenibilidad, busca responder de forma rápida y eficaz ante estos fenómenos, garantizando tanto la seguridad de la ciudadanía como la correcta gestión de los recursos municipales.

El protocolo diferencia los criterios de actuación en función del tamaño de los ejemplares y del número de avistamientos. En el caso de las carabelas pequeñas —de entre 2 y 10 cm—, serán los socorristas quienes determinen las medidas a adoptar. Generalmente, se izará la bandera amarilla junto al logotipo de medusas, indicando que el baño está permitido pero debe hacerse con precaución. Las picaduras de estos ejemplares, aunque molestas, no suelen pasar de leves, y se deja en manos de cada persona la decisión de bañarse o no, según su sensibilidad.

Banderas y megafonía según el nivel de alerta

En el caso de ejemplares de 20 cm o más, el protocolo contempla distintos escenarios. Si el número de carabelas avistadas es bajo —menos de 15 en La Concha o la Zurriola, y menos de 10 en Ondarreta—, se mantendrá la bandera amarilla con el logotipo de medusas y se emitirá un mensaje por megafonía alertando de la presencia de medusas peligrosas y recomendando extremar la prudencia.

Sin embargo, si se supera ese umbral —15 o más en La Concha o la Zurriola, y 10 o más en Ondarreta—, o si se observan más de dos ejemplares en la isla de Santa Clara, se izará la bandera roja, lo que implica la prohibición del baño en la playa afectada. En estos casos, el mensaje por megafonía será claro: “Se están divisando medusas peligrosas en la playa, por lo que el baño está prohibido”.

El protocolo también contempla los casos en los que se produzca una picadura característica de carabela portuguesa, conocida como “latigazo”. Si se trata de un caso aislado y se ha logrado retirar el ejemplar, se mantendrá la bandera amarilla. No obstante, si hay otros ejemplares presentes en la zona o no se puede retirar el que ha causado la picadura, se procederá a izar la bandera roja y a prohibir el baño.

Comunicación y seguimiento continuo

Además, el plan establece un sistema de comunicación constante con los servicios municipales. En caso de avistamiento o picadura, deberá informarse al Servicio de Salud Ambiental, al área de Mantenimiento, a Protección Civil y, en situaciones graves, al 112. Las actualizaciones se realizarán tres veces al día: a primera hora de la mañana, a última hora de la mañana y a última hora de la tarde.

El seguimiento de estos episodios será riguroso y se actualizará cada dos horas como máximo, aunque podrá hacerse en intervalos más cortos si la situación lo requiere. Cuando haya habido bandera roja, se deberá pasar primero a la amarilla antes de volver a izar la verde.

Con esta nueva estrategia, Donostia refuerza su compromiso con la seguridad en las playas y se anticipa a los efectos del cambio climático, que podría estar favoreciendo la llegada de estas especies a nuestras costas. La colaboración entre socorristas, servicios técnicos y ciudadanía será clave para disfrutar del mar con tranquilidad y responsabilidad.