Braulio Gómez, director de Deustobarómetro: "Uno de cada cuatro jóvenes vascos cree que Franco trajo bienestar"
El estudio detecta una fuerte brecha generacional en la valoración del franquismo y alerta de un giro hacia valores más autoritarios entre la generación Z
Braulio Gómez, director de Deustobarómetro: "Uno de cada cuatro jóvenes vascos cree que Franco trajo bienestar"
Uno de cada cuatro jóvenes de la generación Z en Euskadi considera que el dictador Francisco Franco fue un gobernante que trajo desarrollo económico y bienestar social. Así lo recoge la última edición del Deustobarómetro.
Los datos evidencian una clara brecha generacional. Mientras que más del 70% de los baby boomers, la generación X y los millennials consideran que Franco fue un dictador, ese porcentaje desciende hasta el 58% entre los más jóvenes. "En el resto de generaciones hay un consenso muy amplio en identificar a Franco como un dictador y un represor de derechos y libertades, pero ese consenso se rompe entre los más jóvenes", ha señalado el codirector del Deustobarómetro, Braulio Gómez.
Una mirada más generosa entre los más jóvenes
El estudio refleja además que uno de cada cuatro jóvenes vascos cree que el franquismo fue un periodo que aportó bienestar, estabilidad económica y compromiso con la comunidad vasca, una percepción prácticamente inexistente entre las generaciones de más edad. "No estamos hablando de una adhesión ideológica profunda al franquismo, sino de una imagen más permisiva, con menos carga negativa", ha explicado Gómez.
Según los investigadores, este fenómeno se enmarca en una tendencia global. "La generación Z se ha socializado en un contexto de inseguridad extrema, desde la COVID en adelante, y eso ha reforzado valores como la autoridad y la búsqueda de certezas", ha afirmado el sociólogo.
Ultraderecha, redes sociales e inseguridad
Braulio Gómez ha subrayado también el papel de las redes sociales en este cambio de valores. "La ultraderecha se posicionó antes y mejor en el mercado de las ideas digitales, con mensajes simples, directos y emocionales que encajan muy bien en un contexto de miedo e incertidumbre", ha señalado. Un discurso que, según ha añadido, cala especialmente entre los chicos jóvenes, donde se mezcla la búsqueda de seguridad política con una "seguridad de género que sienten cuestionada".