El proyecto de la segunda fase del Hospital Universitario de Cáceres se contratará antes de final de año

Cáceres

La redacción del proyecto para construir la segunda fase del Hospital Universitario de Cáceres (HUC), se contratará antes de final de año por tramitación anticipada con un plazo de redacción de seis meses y las obras, que cuentan con un presupuesto de más de 75 millones de euros podrían salir a licitación, e incluso estar contratadas, a finales de 2023.

El plazo de ejecución de una obra de estas características se estima entre 24 y 36 meses, por lo que el hospital cacereño no estaría completo, en el mejor de los casos, hasta 2025 ó 2026.

Estos son los plazos que maneja el consejero de Sanidad y Asuntos Sociales de la Junta de Extremadura, José María Vergeles, que ha presentado este viernes el anteproyecto de esta segunda fase, que se financiará con cargo a fondos europeos del programa operativo 2021/2023, y que están a punto de ser confirmados a falta de una "última reunión" de la comisión europea para dar el visto bueno a esta inversión.

La luz verde a esta financiación se conocerá después de septiembre y esa cantidad se incorporará a los Presupuestos Generales de Extremadura (PGEx) de 2023, según ha explicado Vergeles, que ha asegurado que hay un 99% de "seguridad" de que el proyecto salga adelante para que Cáceres cuente con un solo hospital y se pueda prescindir de las instalaciones del Hospital San Pedro de Alcántara (HSPA) de forma definitiva, con el traslado de los servicios que presta a las nuevas instalaciones.

Así, el HUC se completará con la construcción de un edificio anexo y comunicado con el que ya existe, pero con una arquitectura diferente, "en forma de peine", con dos plantas en sótano y tres en altura, que contarán con una superficie de 45.000 metros cuadrados, con 258 habitaciones, de las que el 84% serían individuales, y con todos los servicios médicos, hospitalización, hospitales de día, laboratorio, UCI pediátrica, el materno infantil y un hotel para familiares que lo necesiten.

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En el sótano -2 se situarán los vestuarios para los trabajadores, que contarán con un aparcamiento propio, así como las salas de hemodiálisis, extracción de sangre, más los hospitales de día (pediatría, oncología, fase clínica, geriatría y, como novedad, el de salud mental para terapias). En esta planta y con acceso directo desde la calle, también se situará la zona de docencia con un auditorio que se complementa con una biblioteca, que también albergará el nuevo edificio.

En la planta -1 se ubicará el servicio materno-infantil con una moderna Unidad de Trabajo de Parto y Recuperación (UTPR), para dar una atención integral a las madres y niños, así como la zona de rehabilitación cardíaca y otras para tratamientos y pruebas funcionales. En la planta 0 irá neonatología, así como una UCI pediátrica y el área de pacientes críticos de cardiología.

Respecto a las UCIs, Vergeles ha adelantado que también se ampliará este servicio en la primera fase para conseguir 37 boxes, así como nuevas salas de hemodinámica. Las plantas 1ª y 2ª se dedicarán a hospitalización.

Entre las novedades del HUC, el consejero ha avanzado que se mejorará la Unidad de Cuidados Respiratorios Críticos (UCRI), que "tan buenas noticias han dado en los tiempo de la pandemia", ha dicho. Se potenciará el servicio de trasplante de médula, el aislamiento de enfermos infecciosos y una nueva unidad de custodia para personas con privación de libertad, lo que hará que los profesionales implicados "desarrollen su trabajo con mayor seguridad".

El objetivo que se ha perseguido con este anteproyecto es hacer un edificio "más funcional", ha dicho Vergeles, huyendo del diseño de la primera fase, en forma de zig-zag, que no ha resultado cómodo para el desarrollo del trabajo diario, sobre todo del personal de enfermería. Por ello, después de escuchar a los profesionales de los diferentes servicios sanitarios para tener en cuenta sus propuestas, se ha optado por un diseño de líneas rectas que facilite desplazamientos más cortos del personal, tanto en horizontal como en vertical.

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La presentación del anteproyecto ha tenido lugar en el HUC con la asistencia del alcalde de Cáceres, Luis Salaya, miembros de las asociaciones vecinales, y personal sanitario y de administración y servicios del actual hospital que han conocido de manos del consejero la nueva ergonomía del centro hospitalario.

Salaya se ha congratulado porque la segunda fase esté más cerca y el anteproyecto se haya diseñado adaptado a las necesidades de los profesionales, al tiempo que ha confiado en que el HUC pase de ser un espacio de "frustración" a uno de "ilusión", en alusión a los retrasos que ha arrastrado esta infraestructura sanitaria.

Futuro del HSPA y de La Montaña

Respecto al futuro del Hospital San Pedro de Alcántara una vez concluya la obra del nuevo, Vergeles no ha querido adelantar a qué se va a dedicar este inmueble y ha recordado que pertenece a la Tesorería de la Seguridad Social, a la que "se le entregarán las llaves" cuando se cierre.

A este respecto, el alcalde ha matizado que se trata de un edificio muy bien situado desde el punto de vista urbanístico ya que se encuentra en una zona céntrica y "bien vertebrada", por lo que ha augurado que recibirá "propuestas interesantes" para su futuro uso, tanto privadas como públicas.

En cuanto al inmueble del Hospital Nuestra Señora de la Montaña, que también cerró el servicio de hospitalización, Vergeles ha dicho que "en los próximos meses" se conocerán los servicios que albergará, además del Punto de Atención Continuada y el centro de salud de Zona Centro, que ya están ubicados allí.

Vergeles ha destacado el "buen servicio" que ha prestado a la ciudadanía este edificio, propiedad de la Diputación de Cáceres, en los peores momentos de la pandemia de Covid porque ha permitido poder disponer de "un hospital de campaña" sin necesidad de tener que montarlo.