La campaña de la Cereza. Más allá del verano en el valle del Jerte
Hoy por Hoy Extremadura (26/06/2024)
40:00
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Plasencia
La de 2024 no entrará en los anales de la historia del Valle del Jerte como la mejor campaña, puede que entre pero como de las peores, pero la campaña de la cereza en el Valle del Jerte va más allá de la época de recolección entre los meses de mayo y de julio.
Una mala campaña por las lluvias que han llegado en el "peor momento" según reconocía el presidente de la Denominación de Origen Protegida Cereza del Jerte y de la Agrupación de cooperativas del Valle del Jerte, José Antonio Tierno. Tres "danas" que han llegado en los picos de la campaña y que han dañado más del 50% de la producción de tal manera que "se va a reducir en un mes la campaña de recolección" y podría acabar en los primeros días de julio, cuando normalmente se alarga casi hasta agosto.
Pero una vez que culmina la campaña comienza la siguiente no sólo en el campo con el cuidado y la preparación de los árboles para siguiente año, sino también en los laboratorios como en el Centro de Agricultura Ecológica y de Montaña dependiente del Cicytex con sede en Plasencia donde se investiga las nuevas variedades de cereza con selección natural. También el riego, tan necesario para este cultivo "de secano" pero que para ser competitivo en los mercados requiere de unos calibres, tamaños, cada vez más grandes.
Los mercados exteriores son uno de los principales objetivos de la comarca, por ello desde la Junta de Extremadura se potencia la exportación y los acuerdos con mercados internacionales, para que esas nuevas variedades de cerezas puedan llegar con toda la calidad y alcanzar mercados cada vez más lejanos.
Pero el Valle del Jerte no vive sólo de cerezas, sino que también otros cultivos como el castaño, la frambuesa, los higos son parte importante de la renta de los agricultores, también una incipiente economía ecológica que va reuniendo cada vez más productos como queso, cremas, mermeladas, miel... y que va aunando cada vez más prácticas ecológicas.
Una campaña en la que también se aprovecha, como este año, lo que el tiempo y las lluvias estropea, ya que muchas de las cerezas que han sufrido daños por las lluvias serán consumidas en forma de mermeladas, licores u otros procesos para que el oro rojo del Valle del Jerte siga siendo un referente internacional de calidad, sabor y parte inseparable de la imagen de Extremadura.
