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Más presencia de la Guardia Civil y de seguridad privada para la Maruxaina

También se contará con más baños públicos y un punto violeta

Protesta contra el archivo de la denuncia por la grabación y distribución en canales porno de imágenes de mujeres orinando en una calle durante la fiesta de La Maruxaina en 2019 en San Ciprián, Lugo / Eliseo trigo (EFE)

La fiesta de la Maruxaina, que se celebrará en San Cibrao en el concello de Cervo el próximo sábado 13 de agosto, contará con más presencia de la Guardia Civil y de seguridad privada, que velará porque no se repita lo de hace tres años cuando se grabaron ilegalmente a más de cien mujeres orinando y que en algún caso se subieron a páginas pornográficas.

El alcalde de Cervo, Alfonso Villares, ha comprometido “cubrir más los espacios de seguridad y de baños públicos para que la fiesta siga siendo un referente no solo en A Mariña sino en toda la provincia”.

Seguidamente ha recordado que “hablamos de una fiesta declarada de Interés Turístico Gallego y como todas las fiestas la clave es venir con ganas de pasarlo bien y con ganas de disfrutar del pueblo”.

“Tenemos que respetar también todo nuestro entorno, el medio ambiente, el mobiliario público y ser lo más cívicos posible. Esa es la clave fundamental para que todos los eventos festivos sean positivos. Vamos a reforzar la seguridad para que siga siendo una fiesta referente en la provincia”, ha anticipado.

En resumen, se dispondrá de “más guardia civil, así se trató en la Junta Local de Seguridad y también va a haber seguridad privada”. A mayores avanza que se pondrá “un punto de emergencia en la fiesta”.

Habrá, por tanto, más seguridad y “más servicios, también contaremos con un punto violeta y, en definitiva, para ese día (el trece de agosto) vamos tener todo más señalizado”, ha desgranado.

“Se trata de poner a los vecinos y visitantes el mayor espacio para celebrar una fiesta como la nuestra”, ha concluido el alcalde de Cervo, el popular Alfonso Villares.

Finalmente ha apelado a que “la afluencia” de miles de visitantes hace “muy difícil” controlar todos los comportamientos que en ese recinto festivo se puedan producir el próximo sábado.