Síndrome postvacacional: ¿cómo podemos afrontarlo?

Lugo

Sol, playa, piscina, calor, verbenas… Estas son palabras que consiguen transportar a muchos al verano que, tristemente, está llegando a su fin. Con el final de esta estación tan esperada por la mayoría, porque con ella llegan las tan ansiadas vacaciones, no es raro que pensemos en septiembre como el mes de vuelta a la rutina.

Pero afrontar el final del verano no es tan fácil como puede parecer, poco a poco los días son cada vez más cortos y empezamos a sentir el estrés que provocan los horarios ajustados llenos de actividades y tareas por hacer. Incluso se suele decir que justo los días después sufrimos del síndrome postvacacional.

Pero, ¿qué es el síndrome postvacional? Aunque no está incluido en el DSM-5 (el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales), se trata de un fenómeno ampliamente documentado. Mario Salvador, psicólogo especialista en psicología clínica, lo define como un "apagamiento anímico" al que son más susceptibles las personas que suelen hacer renuncias en su vida diaria. Lo recomendable es "poner en nuestras agendas" y "aprender a disfrutar" de esas actividades que nos gustan.

Volver a la rutina es algo inevitable pero existen una serie de consejos que consiguen que septiembre sea más llevadero. Alejandro Manuel Prado, coach emocional, recomienda "programar nuestros horarios, dormir temprano, no llevar trabajo a casa y ejercicio físico". Pero sobre todo pone especial énfasis en la meditación y en "los actos de gratitud" que consisten en recordar diriamente 10 cosas que nos hagan sentir bien.

Y es que el verano tiene además numerosos beneficios para nuestra saludad mental y física. Tal y como señala el psicólogo Mario Salvador, "un mal estado de animo está directamente relacionado con la vivencia del estrés y la depresión de nuestro sistema inmunitario, haciéndonos más propensos a todo tipo de enfermedades".

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Además, este ha sido el verano de regreso para muchos. Después de dos años hemos disfrutado de nuestras viejas costumbres sin necesidad de utlizar mascarillas o de respetar la distancia social. Hemos podido abrazar a nuestros seres queridos y asistir de nuevo a festivales y conciertos. Los lucenses definen esta estación con palabras como "felicidad", "descanso y relax" en el que "el buen tiempo" les ayuda a "desconectar y disfrutar".