La Torre de Meirama se derriba 42 años después de su construcción
El dispositivo incluye el corte al tráfico de la carretera que conecta Cerceda con Mesón do Vento veinte minutos antes de las detonaciones
Juan Manuel Rodríguez García, alcalde de Cerceda, valora la demolición de la Torre de Meirama
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A Coruña
A las tres de la tarde se ha demolido la torre de la central térmica de Meirama. 42 años después de su construcción se ha volado con explosivos tras haberse habilitado un dispositivo de seguridad. El dispositivo ha cortado el tráfico de la carretera que conecta Cerceda con Mesón do Vento veinte minutos antes de las detonaciones.
A partir de la una y media de la tarde Protección civil ha desalojado a los vecinos que viven en un radio inferior a 500 metros de las instalaciones. La Torre, un icono de nuestro pasado industrial, mide 108 de altura y tiene un diámetro de hasta 48 metros y permitía la refrigeración de la central térmica de Meirama, situada junto a la mina de la zona.
También se demolerán los dos silos en los que se almacenaba el carbón en unas instalaciones que están cerradas desde el pasado 30 de junio y se cortarán a la circulación todos los caminos y pistas de acceso a la zona. El complejo cuenta con otra gran chimenea de 204 metros de altura. Naturgy programa su demolición a comienzos del próximo año.
Está previsto que Naturgy, Repsol y Reganosa desarrollen de forma conjunta en las instalaciones un hub de producción de hidrógeno renovable, en el horizonte de 2025. El proyecto, con la instalación de una planta de electrólisis con una potencia inicial de 30 MW, hasta un potencial total de 200 MW, producirá más de 4.000 toneladas de hidrógeno renovable al año en una primera fase y alcanzará una producción total de 30.000 toneladas anuales. Conllevará la creación de hasta 400 empleos de calidad en Meirama y la formación de profesionales de alta cualificación.
La presentación del proyecto cuenta con el apoyo de la Xunta de Galicia y con fondos del Estado y la Unión Europea. El hidrógeno renovable sustituirá el hidrógeno convencional que actualmente utiliza la refinería de Repsol en A Coruña. También se utilizará en otras industrias con la inyección en la red gasista para su mezcla con gas natural.