Galicia no consigue contener el precio del alquiler

Santiago de Compostela

El mercado del alquiler sigue caliente y Galicia no es una excepción. En nuestra comunidad, el precio del metro cuadrado se situó en los 7,7 euros al final de 2022, lo que supone una subida del 5,1% de media, por encima del tope del 2% que había establecido el Gobierno central, aunque por debajo de la media nacional. Aunque los expertos creen que los precios "no pueden subir más" porque serían impagables, lo cierto es que en 2022 el encarecimiento fue notorio. Una tendencia que, aunque parece haberse suavizado en diciembre, siguió siendo alcista en el último trimestre del año.

Según los datos del portal Idealista, en diciembre el precio del metro cuadrado en viviendas en alquiler ascendió hasta los 7,7 euros. Supone una subida del 1,1% si se compara con el mes de noviembre, pero el ascenso todavía es más acusado con respecto a septiembre, con respecto al trimestre anterior. En los tres últimos meses del año el precio se encareció un 1,7%. Y en todo 2022 la subida fue del 5,1%.

El precio del meto cuadrado en alquiler se sigue encareciendo, pero todavía sigue lejos del tope histórico de mayo de 2007, antes de la explosión de la crisis, cuando llegó a costar 8,7 euros.

Hay grandes diferencias a lo largo y ancho de Galicia, pero ninguna zona se acerca a los precios de Sanxenxo, en donde el metro cuadrado costaba 16,5 euros a finales de año. No hay ningún otro municipio de la comunidad en donde, de media, se superen los 10 euros. Solo en Vigo se superan los 9, una cifra a la que se acercan A Coruña (8,8 euros) y Santiago de Compostela (8,2).

En el otro lado de la balanza está Narón, donde el precio se quedó en 5 euros el metro cuadrado, un poco por debajo de la vecina Ferrol (5,3) o de Viveiro (5,4). Por debajo de los 6 euros también están Arteixo, Ribeira y Betanzos, en la provincia de A Coruña.

En el último mes del año ha habido comportamientos muy llamativos, como las subidas de precios registradas en Barbadás, con un encarecimiento del 8,2%, o el caso de Foz, en donde el coste subió más de un 17%. La mayor bajada se registró en O Porriño, donde el metro cuadrado se abarató un 5%.

Si atendemos a la evolución interanual, el metro cuadrado se disparó en Ourense, con una subida del 15,9%, pero hubo varios municipios con incrementos por encima de los dobles dígitos. En Vilagarcía de Arousa el precio subió un 11,9% en 12 meses, mientras que en Oleiros el incremento fue del 12,2%.

Mucha demanda para poca oferta

La subida de los precios se debe a que hay una gran cantidad de demandantes de viviendas para una oferta que es escasa, tal y como explicaba Luz Mateo, gerenta de la inmobiliaria Quatrium en el Hoy por Hoy Santiago. Mucha gente quiere vivir en el centro de las ciudades, pero no encuentran opciones económicas. Esto hace que también esté cambiando la forma que tienen de organizarse, y por eso cada vez es más frecuente que jóvenes, que hace unos años podían permitirse alquilar un piso en solitario, opten por compartirlos.

La gerenta de esta inmobiliaria, sin embargo, detecta que los precios están conteniéndose y no cree que vayan a subir mucho más, porque dejarían de ser pagables para los ciudadanos, cuyo poder adquisitivo no da más de sí. Preguntada por qué debería pasar para que empiecen a disminuir, considera clave una relajación del Euribor, lo que permitiría abaratar el precio de la vivienda, que hubiese más compras, y aliviar el mercado del alquiler.