Cano anticipa el ocaso de Bergantiños

“Mi carrera es como una pirámide, y ahora bajo peldaños con naturalidad”, decía Bergantiños en una entrevista con AS en enero. Con 37 años, el mítico capitán del Deportivo ve cerca el final de su carrera. La decisión, como lleva haciendo en los últimos años, la tomará él mismo, y lo hará una vez termine la temporada. Lo que decida, lo aceptará el Deportivo. Mientras tanto, asume con normalidad su nuevo rol en el equipo, dónde el técnico Óscar Cano ha cambiado su importancia capital en las alineaciones y le ha otorgado un papel sin apenas protagonismo en las alineaciones. Con el míster nazarí, el de la Sagrada ha pasado de titular indiscutible a acumular 20 partidos sin salir de inicio.

Su papel, no obstante, sigue resultando clave en el ecosistema del vestuario. Luce galones de capitán, entrena a gran nivel, ayuda a los más jóvenes y sigue siendo el portavoz de la caseta en todas las circunstancias. Incluso, tras el partido del pasado domingo, Bergantiños, que no saltó al césped ni un minuto, dio la cara por sus compañeros tras el convulso final del partido y ante las críticas de un grupo de aficionados a las puertas del bus del equipo. Ese siempre ha sido Álex.

Del todo a la nada

Esta temporada, Bergantiños comenzó con fuerza en el equipo. De la mano de Borja Jiménez, el capitán fue titular en cinco de los siete partidos que el técnico abulense pudo dirigir al equipo antes de su cese. Pero con la llegada de Óscar Cano, el pelotero coruñés perdió su protagonismo de forma radical. Sólo jugó en el equipo inicial un partido, precisamente en el del debut de Cano con la blanquiazul y ante el Linares. Desde el 16 de octubre, por lo tanto, Bergantiños no es titular en liga con el Deportivo. Alcanza, por lo tanto, la veintena de partidos sin jugar de inicio con su Deportivo.

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El capitán suma 604 minutos en esta temporada, de los que sólo acumula 213 desde la llegada de Oscar Cano. Borja Jiménez sólo estuvo en el banquillo siete partidos. Pero incluso su protagonismo es menor cada semana. Otro dato claro es que sólo ha disputado 33 minutos en los once partidos de este 2023 con el Dépor. De todos ellos, sólo superó los 15 minutos en el partido ante el Badajoz.

No tiene tan poca presencia en el equipo de su vida desde la temporada 2006-07, cuando con Gaizka Garitano primero y Pepe Mel después, el Deportivo sólo le dio ocho partidos a Álex y éste acabó cedido en el Sporting de Gijón al siguiente curso. En ese momento, el de la Sagrada probablemente descartaba un regreso a su casa.

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Siempre importante en el Deportivo

Al margen del símbolo que supone, Bergantiños resultó capital para los diferentes técnicos del Depor en los últimos años. Cuando Carmelo del Pozo lo trajo de regreso al Deportivo, el entonces director deportivo tuvo que convencerlo para volver. Carmelo aseguró que el Depor había cambiado y que en el club “nosotros le hemos abierto las puertas de su casa pero no para un año, o para dos, o para tres: queremos que Álex, que es una persona deportivista, esté aquí muchos años”. Y Bergantiños volvió para quedarse.

Muchos entrenadores y directores deportivos en A Coruña dudaron de sus condiciones o de su técnica, pero finalmente Alex acababa jugando siempre. Dando orden y criterio al equipo. Lo hizo ese curso en Segunda, dónde el equipo lamentó gravemente su ausencia en el aciago día de Mallorca; o en el último curso en el fútbol profesional, dónde Bergantiños jugó 38 partidos en Segunda.

Ya en Segunda B, y ahora en Primera Federación, Bergantiños continuó acumulando minutos y protagonismo tanto con Vázquez como con Rubén de la Barrera. Por supuesto, también con Borja Jiménez, con el que el curso pasado sumó 33 partidos jugados y 2600 minutos en liga regular. Sólo estuvo en el banquillo sin jugar tres partidos. El resto, participó como titular o como suplente. También jugó los dos partidos del playoff.