Casa Cornide para jóvenes en 'koruño': "El Franco se la regaló a la ja, neno"
El 'koruño' es un idioma inventado, pero popular entre los jóvenes de A Coruña, hasta el punto de que se ha convertido en una seña de identidad
A Coruña
La comunidad universitaria se suma a la lucha por la recuperación de la Casa Cornide. Un grupo de estudiantes de la Universidade de Coruña ha comenzado a colaborar con la Comisión pola Recuperación da Memoria Histórica. Son estudiantes de la Escuela de Arquitectura y de la Facultad de Sociología. Usan el 'Koruño' para reivindicar y concienciar sobre la importancia de recuperar el patrimonio histórico. Piden el retorno de "Kel Cornide" después de que "Franco se la regaló a la ja, neno".
El uso del koruño responde a una estrategia para implicar a la juventud de la ciudad. Por ello, cuentan con una cuenta de Instagram llamada @kelcornide. En su perfil publicarán imágenes y composiciones gráficas que trasladen la historia del edificio a los más jóvenes. La Casa llegó a ser sede del Concello de A Coruña, pero en estos momentos está en manos de la familia Franco. Martín Represa asegura que el objetivo es "conseguir a unimidade de Meirás, que a xente vexa a inxustiza e que loite pola recuperación dende o común".
El movimiento estudiantil coincide con la reciente declaración de Cornide como Bien de Interés Cultural. El Gobierno Local ya ha anunciado que la reclamará por lo judicial, es una petición constante de los últimos años. El objetivo de los estudiantes al frente del proyecto buscan recuperar el edificio en manos de la familia del dictador Francisco Franco. Ponen de ejemplo el proceso de recuperación de Meirás, pero "sin comerter os mesmos erros".
Carmen Fernández, Covadonga Canellada, María Rodríguez, Martín Represa, Sara Osorio y Patricia Vázquez -alumnas de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura y Martín Represa,-de Sociología- son los impulsores del proyecto-. El profesor y director de la Escuela de Arquictectura, Plácido Lizancos, y el presidente de la Comisión pola Recuperación da Memoria Histórica, Fernando Souto, colaboran y dirigen el proyecto junto a sus alumnos.
Según los colectivos memorialistas, una "injusticia histórica" que la mantiene en manos de los herederos del dictador, una cuestión que centra un proyecto que utiliza el 'koruño' como recurso para calar entre los más jóvenes: "El Franco se la regaló a la ja, neno", dicen.
El Koruño
El 'koruño' es un idioma inventado, pero popular entre los jóvenes de A Coruña, hasta el punto de que se ha convertido en una seña de identidad y existen incluso diccionarios de términos, muchos desconocidos fuera de la ciudad, aunque con el mítico 'neno' -niño, en gallego, pero aquí utilizado como el apelativo 'tío'- como vocablo más reconocible.
'Vaya barul, el Franco se la regaló a la ja, neno' (Vaya porquería, Franco se lo regaló a su novia, tío) es una de las frases en este idioma a la que recurren seis jóvenes de entre 21 y 23 años que realizan un proyecto con la Universidad de A Coruña y la Comisión por la Recuperación de la Memoria Histórica de la Ciudad (CRMH).
Carmen Fernández, Covadonga Canellada, María Rodríguez, Martín Represa, Sara Osorio y Patricia Vázquez -ellas alumnas de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura y él, de Sociología- se conocieron en febrero y empezaron a trabajar en el grupo de análisis arquitectónico, de la mano del profesor Plácido Lizancos y del presidente de la CRMH, Fernando Souto.
"Ninguno de nosotros estaba en ningún colectivo de memoria histórica, para nosotros fue el primer contacto con este tema, pero pronto vimos que lo que ocurre con la Casa Cornide es una injusticia histórica, que todo el mundo ve como algo negativo, aunque no llega a los jóvenes", explica a EFE Martín Represa.
Por eso, su idea desde el principio fue "que cale esta idea entre la juventud y que la gente de A Coruña vea la Casa Cornide como un elemento de la ciudad igual que otros".
Para eso, estos alumnos, de A Coruña, Santiago, Asturias y El Bierzo (León) acaban de crear una cuenta de Instagram que dotarán de contenido poco a poco y que llaman @kelCornide, pues 'kel' se traduce como 'casa' en este curioso idioma que utilizan como recurso.
Han diseñado una serie de imágenes, que planean exportar a adhesivos y cartelería para distribuir por la ciudad y entre la juventud, que resumen la historia de la Casa Cornide, recién declarada Bien de Interés Cultural y pendiente de una reclamación judicial del Ayuntamiento de A Coruña para intentar recuperar su propiedad.
Las ilustraciones componen un mosaico con seis etapas y juegan con la iluminación de las ventanas para expresar las diferencias entre ellas.
"Empezamos con la etapa en que la ocupaban los Cornide, los propietarios originales, y esas ventanas tienen mucha luz. Luego pasa a manos del Ayuntamiento -del que incluso fue sede antes de recalar en la actual plaza de María Pita-, durante la ocupación francesa, donde es más oscura", agrega Martín Represa.
La tercera imagen representa cuando, en un breve paso por manos del Ministerio de Educación de Franco, "se intentó crear allí un conservatorio de música, pero decían que era muy pequeño, por lo que lo descartaron y cedieron el edificio de nuevo al Ayuntamiento, que después la vendió sin tener ese conservatorio en ningún sitio, por lo que el argumento quedó invalidado".
La "compra fraudulenta de la Casa", en la que la adquirió Pedro Barrié de la Maza por 305.000 pesetas para luego venderla tres días después por 25.000 a Carmen Polo, entonces mujer de Franco, es la cuarta imagen, "con las ventanas totalmente en negro".
La quinta y la sexta la forman la etapa en la que se empezó a hablar de fraude y a estudiar la posibilidad de reclamar su propiedad y el momento en que se declaró Bien de Interés Cultural, de hace apenas unos días.
Es, resume este alumno, "un paso más" en el proceso de recuperación de la Casa Cornide, pero clave al buscar la implicación también de los jóvenes, que deben saber por qué, casi 61 años después de aquella subasta, los Franco todavía tienen una 'kel' en A Coruña.