El Celta no ha solucionado todavía el problema que tiene con Santi Mina. Tras finalizar su año de cesión en el Al Shabab de Arabia Saudí el delantero tiene que regresar a Vigo. El club no le rescindió en su momento el contrato y ahora trabaja a marchar forzadas para encontrar una salida para que el futbolista no siga en el club vigués. El delantero fue condenado en primera instancia a cuatro años de cárcel por abuso sexual, un delito cometido en Mojácar en el año 2017. Está pendiente todavía de una sentencia definitiva. El canterano del club vigués podría solicitar iniciar la pretemporada con el equipo. Por eso el club quiere anticiparse. El presidente del Celta ha asegurado hace unas horas que están tratando de negociar la rescisión del año de contrato que todavía le queda al vigués. «Lo estamos manejando, pero tenemos que ver qué posibilidades tenemos, qué es lo que él quiere. Acordaos que el que tiene siempre que firmar lo que se quiera hacer es el jugador. El club puede proponer. Nosotros queremos hacer una cosa, pero necesitamos su beneplácito. Sin el visto bueno del jugador, no hay nada que hacer. Estamos intentando negociar con él». Mouriño fue más allá y aseguró que no tienen ningún problema con él «Si hay un arreglo, lo firmaremos. Santi Mina ha tenido un problema, pero no deja de ser un jugador canterano y fuera de eso, que es condenable al 100 %, no tenemos ningún problema con él. Fue duro tomar las medidas que tomamos, que perjudicaban al club, pero se tomaron». El fallo del caso Santi Mina se produjo el 4 de mayo del año 2022- El club le abrió un expediente y lo apartó del equipo. El delantero solicitó por burofax volver a los entrenamientos. El vigués entrenó todos los días en Afouteza antes de cerrar su salida al equipo saudí. El 3 de julio el Celta vuelve a los entrenamientos. La directiva tiene dos semanas para alcanzar un acuerdo con Mina.