Bibiana García, bióloga: "Ojalá la movilización no decaiga; la contaminación por plásticos es un problema muy grave"
La ONU calcula que cada año acaban en el mar ocho millones de toneladas de plástico, el equivalente a tirar 800 veces la Torre Eiffel al mar
Coruña Científica, con Bibiana García
13:24
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A Coruña
La semana pasada el Grupo Naturalista Hábitat, en esta sección de Coruña Científica, alertaban que el episodio actual de llegada de pequeñas partículas de plástico a las costas gallegas se suma a un problema ya crónico y enorme, que es la contaminación por plástico que sufre el mar desde hace años. Así que hoy vamos a intentar aprender algo más sobre este material, que hoy en día nos rodea por todas partes.
La Organización de Naciones Unidas (ONU) calcula que cada año acaban en el mar ocho millones de toneladas de plástico (la Torre Eiffel pesa unas 10.000 toneladas, estamos hablando de 800 torres eiffeles de plástico). Según la ONU también, cada minuto compramos un millón de botellas de plástico a escala mundial. Y tenemos que pensar que es un material que tarda cientos de años en degradarse… Los plásticos están formados por moléculas muy grandes, que sobre todo se obtienen del procesado del petróleo crudo, y que se llaman polímeros. Se llaman así porque su estructura repite una unidad que se denomina monómero. Las propiedades de cada plástico están determinadas en buena parte por cómo es ese monómero básico que se repite en su composición. De forma general se pueden agrupar en dos familias principales. Los termoplásticos, que son los que se ablandan con el calor y se endurecen cuando se enfrían, y los termoestables, que nunca se ablandan una vez moldeados. Ninguno de ellos se degrada con facilidad, son muy resistentes, por eso nos los encontramos por todas partes.
¿Cuándo comenzó el ser humano a utilizar los plásticos?
El primer plástico totalmente sintético del mundo fue la baquelita, inventada en Nueva York en 1907, de lo que están formadas por ejemplo las bolas de billar, aunque los plásticostodavía tardarían en popularizarse hasta mediados del siglo XX, sobre todo debido a que son fáciles y baratos de producir. Algunos nombres sonpolietileno, del que se obtienenlas bolsas, los tetrabriks, los vasos, las botellas… Otro elpolipropileno, que está presente en loscoches, desde los parachoques hastala moqueta. El PVC (policloruro de vinilo o vinilo a secas),otro plástico cotidiano. El poliestireno, más conocido comoPorexpán. Y por supuesto también está el PET, tereftalato de polietileno, el componente de las pequeñas partículas que están llegando ahora a nuestras costas, y que suelen usarse paragenerar envases y también textiles.
Una gran variedad desde luego, que incluso coloniza nuestro cuerpo. Un estudio de la Agencia Federal de Medio Ambiente de Austria ya encontró en el 2018 que las heces de personas de países tan distintos como Japón, Italia o Rusia contenían partículas de una nueve tipos de plásticos diferentes de entre 50 a 500 micras (un cabello tiene 100 micras), estamos hablando de microplásticos, claro. Hay dos tipos, los llamados primarios, partículas de menos cinco mm que se vierten al medioambiente ya así, y los secundarios, que son el resultado de la degradación de otros más grandes, como botellas, bolsas de plástico... Suponen alrededor del 30% de la contaminación que llega a los océanos.
¿Existen islas de plástico? ¿Cómo se puede reutilizar?
Sí, la más grande está en el Pacífico, a medio camino entre Hawái y California, con una extensión que equivale a Francia, España y Alemania juntas. Pero hay otras más pequeñas, algunas se generan de forma temporal, en el mar Caribe, en el Atlántico o en el Índico.
Ya empieza a haber algún proyecto que buscan reciclar el plástico a gran escala. Por ejemplo, en Holanda tienen una iniciativa para construir carreteras de plástico reciclado como alternativa a las tradicionales de asfalto. De hecho ya hay una en un pueblo al norte del país con un nombre impronunciable, Giethoorn. Quizás en el futuro pueda extenderse esta idea, incluso a otras estructuras, lo que permitiría reciclar buena parte de la basura de plástico que generamos. A un nivel más casero todas las personas podemos intentar usar el menor plástico posible y reciclar el que ya tenemos. Algunas propuestas concretas podrían ser usar todo lo posible materiales biodegradables, no utilizar productos plásticos de un solo uso, comprar a granel y reutilizar envases… Muchas de estas medidas ya las conocemos, pero a veces nos es cómodo ni fácil aplicarlas.
Y eso que empieza a haber bastantes lugares donde podemos comprar a granel, tanto alimentos como productos de limpieza. En realidad es volver a vivir un poco como lo hacían nuestros abuelos, ya que comentabas que el plástico se popularizó a mediados del siglo XX. Tendremos que preguntarles.
Un buen sitio al que recurrir. Y también recordar lo que decían los compañeros del Grupo Hábitat el martes pasado, que esta concienciación y movilización que ha surgido a raíz de la llegada de esta plaga de pequeñas partículas de plástico a las playas no decaiga, porque tenemos un problema muy grave de contaminación por plásticos que está lejos de solucionarse. Y si la sociedad empuja también se tomarán medidas mucho más allá de las que podemos llevar a nivel individual.
Esperemos que a partir de ahora tengamos este grave problema en la cabeza cada vez que vayamos a adquirir cualquier producto.
La Xunta advierte que ha recogido el doble de otros plásticos que de pellets
El delegado del gobierno, Pedro Blanco, se ha reunido con el director xeral de Salvamento Marítimo para coordinar los medios aéreos y marítimos demandados por la Xunta a la búsqueda de pellets. Insiste en que lo más efectivo es la limpieza de playas y sigue poniendo a disposición de la Xunta personal que aún no ha sido requerido.
Los pellets siguen llegando a nuestras costas y nos enfrentan al problema de los plásticos en el mar. Dice la Xunta que ha recogido en las playas el doble de plástico que de pellets. Las organizaciones ecologistas advierten de que los pellets son muy pequeños y díficiles de recoger y se introducen en la cadena trófica. A su juicio su llegada masiva es ahora mismo un problema, pero son expresión de la contaminación por plásticos en el mar.
Los pellets son muy pequeños, en apenas 10 gramos de pellet se cuentan hasta 620 lágrimas por lo que la necesidad de su retirada no se justifica sólo por su peso si no por su tamaño. El grupo ecologista Hábitat señala que los pellets son preocupantes porque se introducen fácilmente por su condición de microplásticos en la cadena trófica junto a los plásticos en general.
Los ecologistas llevan muchos años haciendo limpieza de playas y advirtiendo de la situación.
La Xunta de Galicia dará a conocer hoy los integrantes de su comité de expertos para gestionar esta crisis que se constituye más de un mes después de la primera alerta por la aparición de la avalancha de microplásticos procedentes del Toconao.