Los trabajadores aplazan la huelga de la planta de Nostián en pleno conflicto en la recogida de basuras

A Coruña

Los trabajadores de Albada, la empresa concesionaria de la planta de tratamiento de basuras de Nostián, aplazan la huelga que tenía que empezar esta noche. Atienden la petición del Concello de A Coruña para que esperen la respuesta de los Ayuntamientos del área a su propuesta de nuevo concurso para la gestión de residuos. Dan de plazo hasta el 5 de agosto para que se busquen soluciones a la situación de abandono de la planta y la interinidad del modelo. Lo cierto es que su decisión supone un respiro porque sus paros empeorarían aún más la situación generada por la huelga del servicio de recogida.

Recuerdan que el servicio de la planta de basuras de Nostián está en prórroga forzosa desde hace cuatro años, en 2020 y en ese tiempo no se han mantenido de forma adecuada las instalaciones. Advierten de que la falta de mantenimiento de la planta está causando accidentes laborales entre la plantilla. En lo que va de año más de 12.

Sus salarios están congelados desde 2012 y la situación está ahogando la economía de más de 120 familias. Canosa explica que la subida salarial está condicionada según su convenio actual a la nueva concesión.

La CIG, este jueves, en un comunicado, informa de que la plantilla ha decidido suspender los paros "ante la petición del gobierno local" con el objetivo de "facilitar las negociaciones entre todas las partes implicadas", incluida la empresa concesionaria, Albada.

Al respecto, los empleados recalcan "los avances" conseguidos en la última reunión entre el Ayuntamiento de A Coruña y el Consorcio de As Mariñas "para la publicación de los pliegos de la nueva concesión", pendiente desde hace cuatro años.

Por ello, el personal ha decido "suspender la huelga y dar un margen de tiempo hasta el próximo 5 de agosto", anuncia la CIG.

No obstante, añade, ha anunciado que retomará las movilizaciones "si en este periodo no se detectan avances sustanciales ni compromisos por parte de la empresa y las administraciones que garanticen las condiciones de trabajo, el empleo y el futuro de las instalaciones".

La huelga se había convocado para exigir a Albada "medidas en materia de seguridad y salud laboral" y "garantías" para el cobro íntegro de la paga de productividad.