Anna Turbau: "¿Cómo puede ser que tenga que venir una fotógrafa catalana a enseñar a los jóvenes su propia historia?"
La fotoperiodista que documentó la Galicia de las luchas sociales en la Transición visita Lugo para hablar de su trabajo
Lugo
La fotoperiodista catalana Anna Turbau llegó a Galicia a mediados de los años setenta de forma temporal, pero lo que encontró la hizo quedarse cuatro años en los que retrató la realidad del psiquiátrico de Conxo, las luchas para conservar los montes vecinales o contra la AP-9 o la realidad de Os Ancares cuando permanecía completamente aislados de lo que ocurría en la sociedad y en las ciudades.
"Yo toda la información que tenía de Galicia era que tenía un paisaje precioso y buenos mariscos", cuenta, "pero cuando llegué me encontré con otra realidad muy escondida y completamente diferente, que fue la que a mí me interesó". Desde 1975 y hasta 1979 recorrió Galicia documentando las luchas sociales y la reivindicación de un pueblo que se revelaba contra el caciquismo para "darla a conocer y poner en valor", frente a quienes "se esforzaban por mantenerla oculta a través de la represión y la censura".
A punto de cumplirse medio siglo después entiende que esas imágenes ya son "la memoria de Galicia". ¿Qué es lo que han aportado todas las fotografías que hizo?: "La verdad", asegura con firmeza. "Poder hacer que todo el mundo conociera esta otra cara creo que fue importante, porque sino Galicia sería otra cosas, es el hilo de su historia", añade.
Ahora regresa y no reconoce "esa misma Galicia reivindicativa" que retrató en los años 70, porque "las cosas han cambiado mucho y ahora se lucha de otra manera". Confía, a pesar de todo, en que "va a seguir luchando por esos derechos que son de todos y que todavía es muy importante reclamar".
Os Ancares
Uno de los lugares de la provincia de Lugo que permanecen inmortalizados en el carrete de la fotoperiodista son Os Ancares. "Estuve muy poco", dice, "pero fue muy intenso y sobre todo recuerdo asombro". Lo que le impactó fue "ver cómo había realidades tan desconocidas, tan ancestrales". Cuenta que estando allí se hizo consciente de que "lo que en último caso podría llegar allí era algo que iba arrasar, y ahora lo vemos en lo distinto que es o en las pallozas, que ahora son para el turista".
Notó cómo "se estaba rompiendo el mundo rural" porque había un flujo muy importante hacia las ciudades, pero Os Ancares "todavía estaban muy alejados todavía y completamente abandonados por el resto de la sociedad cuando tenían los mismos derechos que la gente de las ciudades". "Ahora igual menos", continúa, "pero también pasa".
Miradas jóvenes
Aprovechando su visita a Lugo, Anna Turbau visitó algún centro educativo como el San Xillao para hablarles sobre su trabajo. "Parece que me den energía", cuenta, "porque están tan atentos a todo lo que les cuento que es una gozada". Le sorprende tanto interés sobre todo porque "las fotografías que les he enseñado son duras", pero sobre todo que no conozcan las historias que hay detrás de ellas.
"Son imágenes que pertenecen a la época de sus abuelos, pero había cantidad de cosas que desconocían", señala, y se pregunta "cómo puede ser que tenga que venir una fotógrafa catalana de 75 años a contarles su propia historia". En la parte buena destaca el interés que consiguió generar al verles que "quedaban buscando información sobre las cosas que yo les había contado".
Para Turbau es una demostración de "lo importante que es potenciar la memoria histórica" que con sus fotografías contribuye a divulgar. "Es muy importante", concluye, "que estos chavales tengan toda la información posible sobre su pasado".
Antía Montes
Radio Lugo