El IES San Paio de Tui seguirá movilizándose para recuperar el tercer conserje
El consello escolar del centro apuesta por aumentar las protestas para reclamar una plaza reconocida por la Xunta
Entrevista a Milucho Romero, profesor de Matemáticas, y José Antonio Rodríguez, conserje del IES San Paio de Tui
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Tui
El repentino fallecimiento de uno de los conserjes del IES San Paio de Tui el pasado 10 de febrero ha dejado al centro con un bedel para el turno de mañana, con 624 alumnos, y otro para el de la tarde, con cerca de 400 estudiantes de la Escuela Oficial de Idiomas.
A pesar de estar reconocido un tercer puesto en la RPT de la Consellería de Educación, el propio conselleiro Román Rodríguez, la semana pasada en el Parlamento gallego, descartaba su reposición a pregunta del BNG, asegurando que dos conserjes "son suficientes para atender las necesidades del centro". A pesar de esta respuesta, profesores, alumnos y familias mantienen sus concentraciones de los jueves a la hora de los dos recreos y no descartan llevar sus reivindicaciones a la jefatura territorial o incluso hacer una huelga, tal y como nos ha avanzado al profesor de Matemáticas y exdirector del IES Pazo da Mercé en As Neves en una entrevista en Hoy por Hoy Baixo Miño.
También hemos hablado con uno de los conserjes del IES San Paio, José Antonio Rodríguez, quien nos ha explicado lo que implica trabajar solo durante el turno de mañana. "Cando fago calquera xestión que me obrigue a desprazamento polo centro a Conserxería e o portal quedan desatendidos. Isto fai que as familias teñan que agardar moito tempo para que se lles abra, que neses momentos non se poidan facer fotocopias, que se algún alumno está enfermo non poida chamar a casa, non poidan entrar a facer entregas, non se colla o teléfono, etc", comentó.
Seis meses sin ascensor
Después de varias averías e intentos de reparación, el día 10 de octubre de 2024 los responsables del mantenimiento del ascensor comunicaron a la dirección del instituto que no existían recambios de las piezas que precisaba y, por lo tanto, había que renovarlo. Hasta el 26 de febrero no acudió al centro un representante de la Consellería de Educación para constatar que el elevador no tenía reparación posible y había que instalar uno nuevo.
Romero señalaba que la falta del ascensor está provocando que "unha das docentes, que ten mobilidade reducida, non poida desprazarse polo centro. Ademáis varios alumnos teñen que desprazarse con muletas, tendo que subir escaleiras constantemente ante a imposibilidade de empregar o ascensor. Na planta baixa xa non dispoñemos de máis aulas nas que poder ubicar aos grupos nos que hai estudantes con este problema", subraya.
