Las trabajadoras del Servizo de Axuda no Fogar denuncian desprotección: "Hay compañeras que no denuncian por miedo"

Las trabajadoras del Servizo de Axuda no Fogar en Galicia claman después del asesinato de una compañera en O Porriño. Afirman que están desprotegidas y que "muchas compañeras no denuncian casos de acoso por miedo a quedarse sin trabajo". Teresa, de 48 años, lo había hecho ante el sindicato, pero no había ido más allá.

En una entrevista en el Hoy por Hoy Santiago, Esther Goris, la presidenta del comité de empresa en Compostela, lamentó las condiciones en las que están trabajando, y reclamó a las administraciones que evalúen los hogares a los que mandan a estas empleadas.

En este sentido, indicó que van a lugares en los que se encuentran solas con los pacientes y con sus familiares, sin ningún tipo de medida de protección, y criticó que las administraciones se pongan de lado.

La Xunta no contempla protocolos de prevención

El Gobierno autonómico no contempla la puesta en marcha de ningún protocolo de prevención de acoso ni incrementar la seguridad laboral para las trabajadoras del SAF.

La conselleira de Política Social, Fabiola García, pide a las mujeres que atienden en domicilios que denuncien posibles agresiones o situaciones de acoso, y descarga en las propias empleadas la responsabilidad de protegerse.

García comentó que se han puesto a disposición de la familia de la mujer que era atendida por la víctima. De momento ha sido trasladada a un centro de día.

Un servicio infrafinanciado

El subdelegado del gobierno en la provincia de Pontevedra, Abel Losada, apunta a dos causas de fondo en este crimen: los problemas de la sanidad pública para atender a los enfermos psquiátricos, con largas listas de espera que pueden llegar al año, y también a la falta de financiación por parte de la Xunta del SAF, que deja a los concellos contra las cuerdas y conduce a la precariedad laboral de las trabajadoras.