Realidad aumentada en cirugía: profesionales del CHUAC y la UDC colaboran en una investigación pionera
En pleno debate sobre la implantación del grado de Medicina en la UDC, los sanitarios destacan la colaboración como la mejor forma para beneficiar a los pacientes
A Coruña
El uso de la realidad virtual en quirófano ha cobrado protagonismo esta mañana en el CHUAC en una prueba experimental del uso de esta tecnología. Profesionales del CHUAC han evaluado un proyecto que forma parte de la tesis de Ánxela Pérez, doctoranda en el CITENI de la Universidad de A Coruña. En pleno debate sobre la implantación del grado de Medicina en la UDC, los sanitarios destacan la colaboración como la mejor forma para beneficiar a los pacientes.
Sin entrar a valorar los desencuentros entre universidades y Xunta, subrayan la importancia de las buenas relaciones entre instituciones académicas y hospital. Pablo Codesido es médico traumatólogo en el CHUAC.
En este momento el CHUAC ya se realizan algunas intervenciones de forma robotizada, aunque pretenden seguir avanzando en la aplicación de la tecnología al ámbito sanitario.
Realidad aumentada para mejorar la cirugía
La investigación se enmarca en la tesis doctoral titulada Interfaces virtuales y realidad aumentada para cirugía, desarrollada por Ánxela Pérez en el Campus Industrial de Ferrol, bajo la dirección de Florian Michaud, investigador del LIM, y Nieves Pedreira, profesora en la Escola Universitaria de Deseño Industrial (EUDI).
Esta mañana se celebró en el Hospital Universitario de A Coruña una sesión experimental centrada en evaluar la usabilidad y funcionalidad de distintos sistemas de RA en quirófano. El objetivo: analizar el comportamiento de las gafas inteligentes y sus diferentes modos de control —por gestos, mirada, voz o inclinación de cabeza— en una situación clínica real.
Una mirada digital para la cirugía del futuro
Entre los participantes estuvo el Dr. Pablo Codesido, médico adjunto del Servicio de Traumatología y Cirugía Ortopédica del CHUAC, junto a otros especialistas que valoran el potencial de la RA como herramienta de asistencia en intervenciones quirúrgicas.
“Colaboramos activamente con esta investigación porque creemos en las tecnologías de vanguardia aplicadas a la salud —como la robótica, la inteligencia artificial y las interfaces virtuales—. Poder acceder a información crítica sin interrumpir la intervención puede marcar una gran diferencia”, explica el Dr. Codesido.
Esta sesión da continuidad a otra celebrada el 9 de julio en la Área Sanitaria de Ferrol, donde también se testó el sistema con la participación de la Dra. Laura Ameneiro y otros especialistas. A diferencia de enfoques más teóricos, este proyecto busca validar la tecnología directamente en el quirófano, incorporando la experiencia de los profesionales sanitarios desde el primer momento.
Aplicaciones reales de la realidad aumentada en medicina
La realidad aumentada permite superponer información digital —como imágenes médicas, datos anatómicos o gráficos— sobre el campo de visión del cirujano, sin aislarlo del entorno físico. A diferencia de la realidad virtual, esta tecnología enriquece la percepción del mundo real y ya se está utilizando con éxito en procedimientos quirúrgicos complejos como:
- Artroplastia total de rodilla: mejora la precisión del corte óseo guiando al cirujano sin necesidad de pantallas externas.
- Cirugía de columna: ayuda a trazar la trayectoria óptima para la colocación de tornillos pediculares, reduciendo el riesgo de dañar estructuras sensibles.
- Neurocirugía: permite superponer escáneres cerebrales directamente sobre el cráneo del paciente, facilitando un acceso más preciso y menos invasivo.
- Cirugía hepática y oncológica: localiza con precisión tumores o vasos importantes sin interrumpir la intervención para consultar imágenes externas.
Además, estos sistemas se adaptan dinámicamente a los movimientos del cirujano y del paciente, proporcionando asistencia visual en tiempo real durante toda la intervención.
Diseño y tecnología al servicio de la salud
Desde el CITENI destacan que el éxito de la RA en cirugía depende del diseño de interfaces intuitivas, rápidas y eficaces. “La participación del personal sanitario es clave para desarrollar soluciones útiles, seguras e integrables en el día a día del quirófano”, subrayan.
Esta colaboración entre investigadores y profesionales clínicos representa un paso firme hacia una cirugía más asistida, precisa y humanizada, donde la tecnología se pone verdaderamente al servicio del paciente y del equipo quirúrgico.
