Chequeo a la justicia en Galicia: “Faltan medios, nos preocupa la imagen de lentitud”
En la SER hablamos con Sandra María Iglesias, jueza decana en Santiago, María Iglesias, jueza de primera instancia e instrucción de Verín y Francisco Alañón, magistrado de la sala de lo civil y lo penal del TSXG de la situación actual de la justicia en Galicia
Chequeo a la justicia en Galicia
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Santiago de Compostela
Excesiva litigiosidad, escasos medios y puesta en duda de su imparcialidad... son algunas de las preocupaciones que estos 3 los jueces han expresado aquí en la SER. Prefieren no hablar de colapso judicial pero sí de "atasco", especialmente en el caso de Santiago. Su jueza decana, Sandra María Iglesias, señala que "se podrían crear 2 juzgados más si atendemos al número de procedimientos que lleva la jurisdicción civil. Además Santiago, por capitalidad y por ser la residencia de muchos órganos administrativos, asume causas con gran complejidad técnica". Iglesias sostiene que a la hora de crear plazas judiciales o dotar de medios "no se puede atender solo a criterios numéricos".
Un atasco judicial que provoca que los procesos se demoren durante meses. Sandra Iglesias advierte de la necesidad de más jueces. Señala que "la tasa de jueces en los países de nuestro entorno es de 22 por 100.000 habitantes, mientras que en España no llega al 12". Alañón incide en que no siempre las demoras son responsabilidad del juez: "una incomparecencia por enfermedad de un testigo puede retrasar un juicio cerca de un año."
Tribunales de Instancia
En este sentido han valorado positivamente la implantación de los Tribunales de Instancia, pero con algunas sombras. Francisco Alañón lo resumía así: "vamos a tener que cambiar las ruedas del coche mientras está en marcha". Creen que a largo plazo mejorará el sistema judicial y destacan que facilita la cobertura de plazas, ya que "antes la creación de una plaza judicial exigía la creación de un juzgado: mientras que ahora basta con que se cree la plaza nada más, porque ya tiene la estructura detrás. Sobre el papel va a ser un paso adelante."
También se han referido a la creciente politización de la justicia. Defienden que la crítica es legítima siempre que se haga con respeto, pero ven peligroso "que se transmita la idea de que instituciones no funcionan o que lo hacen con motivaciones espurias". Y concluyen que es "rotundamente falso que los jueces no sean imparciales o que se dediquen a hacer política".
