M.ª Ángeles García: "No se puede pedir a un profesional no cualificado que atienda a menores que necesitan ser alimentados por sonda "

Murcia

Un auxiliar educativo es un personal de atención directa al alumnado con necesidades educativas especiales, es decir, con discapacidad o trastorno grave de conducta que presenta alguna necesidad específica para las actividades básicas de la vida diaria, como desplazamientos, alimentación y aseo, buscando la promoción de su autonomía personal y favoreciendo su participación en todas actividades escolares.

En la Región de Murcia, los auxiliares educativos trabajan en tres sectores diferentes: en los centros educativos de la Consejería de Educación, en los centros ocupacionales del IMAS y en los centros de protección de menores de la Consejería de Igualdad, Mujer, LGTBI, Familias, Política Social y Transparencia.

María Ángeles García Peñalver, liberada de la sección de personal de servicios educativos complementarios de la Federación de Enseñanza de CCOO Región de Murcia, ha denunciado en SER Enfermeras "la grave situación que están sufriendo día a día muchos Auxiliares Técnicos Educativos (ATE´s), obligados a realizar labores propias de personal sanitario que no les competen".

María Ángeles es funcionaria de carrera desde hace 38 años en la Consejería de Educación como auxiliar educativo. Estudió psicología y un máster en Intervención educativa en contextos sociales. Ha trabajado en centros de educación especial, con y sin residencia, en centros ordinarios, y en la actualidad, en centros de secundaria.

Cada Comunidad Autónoma tiene una estructura organizativa diferente, por lo que hay muchas diferencias de unas a otras. En concreto, en este colectivo hay una diversidad de nombres para definir a los profesionales (educadores de educación especial, auxiliares técnicos educativos, especialista de apoyo educativo,...) así como diferentes niveles profesionales (técnicos auxiliares, técnicos especialistas,...) o administrativos (funcionarios o personal laboral) para el mismo trabajo.

Según el Colegio Oficial de Enfermería de la Región de Murcia, todos los implicados en esta situación; profesionales, asociaciones de directores de centros públicos y asociaciones de padres de niños, están reclamando un nuevo perfil profesional . Es un proceso que tiene que ver con las nuevas conceptualizaciones y derechos de las personas con discapacidad. "Nosotros llevamos años reclamando la profesionalización del colectivo como ya han hecho otras nueve comunidades, en las que se exige la titulación de técnico o bachillerato para acceder al puesto".

Cada vez es más frecuente la asistencia a la escuela de menores con necesidades sanitarias. Cuando estos alumnos no tienen el diagnóstico de discapacidad la administración tiene más dificultad en solucionar el problema. recuerdan desde el colegio profesional.

Las necesidades y exigencias actuales del alumnado hace necesario un personal más formado y cualificado. Una de estas nuevas necesidades están las sanitarias en horario escolar consecuencia de la escolarización de menores con patologías crónicas o enfermedades que requieren determinadas atenciones sanitarias en horario escolar como diabéticos, traqueotomizados, los que necesitan sondaje periódico o los que necesitan ser alimentados por sonda.

Como ejemplo denuncian un caso concreto, el de un menor escolarizado en un IES de la región que necesita alimentación por sonda, y que desde las Consejerías de Educación y Sanidad no estiman que sea una necesidad sanitaria, por lo que se "fuerza" a las auxiliares educativas, sin formación sanitaria, a que realicen a diario esta tarea. Y esto a pesar de que el centro cuenta, en teoría, con enfermera escolar. Sólo en teoría ya que, como sabemos, el programa PACES de enfermería escolar en nuestra comunidad autónoma lo que hace es poner a una enfermera en los centros de salud para atender a los colegios e institutos de esa zona, un recurso totalmente insuficiente ya que no hay tiempo material para atender en la misma jornada a más de un centro educativo, incluso separado por varios kilómetros en el caso de áreas rurales.

Los auxiliares educativos acceden a realizar esta tarea, en muchos casos forzados y están consiguiendo "normalizar" que la alimentación por sonda sea una tarea no sanitaria. "Un fallo o complicación al manipular la sonda puede dar lugar a atragantamientos y asfixia del menor, una situación para lo que un auxiliar educativo no está preparado y que pone en grave riesgo a los escolares con esta necesidad", recuerda María Ángeles García Peñalver, de CCOO.

De esta forma y con esta situación, desde el Colegio de Enfermería de la Región de Murcia insisten en la importancia de logar el objetivo 'Un cole, una enfermera', cuestión que llevan reivindicando desde hace años.